Los nueves jóvenes napolitanos detenidos por la policía en la última investigación que se ha llevado a cabo en la isla para acabar con robos con violencia que llevan el sello de la denominada banda del Rolex ingresaron anteanoche en la cárcel de Eivissa sin derecho a fianza. Seis de los acusados se alojaban en un hotel de Port des Torrent y el resto en otro establecimiento del municipio de Eivissa. La policía se incautó en una de las habitaciones de un Rolex de oro que había oculto en un falso techo.
Los indicios policiales apuntan a que el primero de los grupos se dedicaba a la planificación y ejecución de los robos mientras que el segundo era el siguiente escalón en la organización para recoger el material robado y posiblemente entregarlo a los que realmente preparaban su salida de la isla. La investigación judicial dilucidará en los próximos meses el grado de participación de cada de uno de los arrestados así si éstos formaban parte de un mismo grupo o si bien eran «células» distintas.
La orden de ingreso en prisión se dictó después de que al menos dos de los sospechosos fueran reconocidos fotográficamente por cinco personas. Éstas los vinculan con dos robos con violencias ocurridos durante este mes. Los nombres de otros dos sospechosos figuraron, además, en otra investigación policial y durante ésta, además, se ha encontrado a uno de ellos con una carta de identidad falsificada. Aunque los dos grupos negaron conocerse entre sí, los indicios policiales apuntan a lo contrario. En junio, la policía desmanteló otro grupo napolitano tras detener a siete jóvenes.
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