El irlandés Bourke se lanzó a la bahía desde este barco y al día siguiente su cadáver fue encontrado en aguas del Port des Torrent.

J.M.A.

El Ministerio Fiscal solicita una pena de cuatro años de prisión para el ibicenco José R.R., capitán del barco de turistas desde el que en agosto de 2006 dos jóvenes se lanzaron a la bahía de Portmany y uno de ellos murió, el irlandés John Basile Bourke, sobrino del entonces ministro de Defensa de su país, Willie O'Dea.

El Ministerio Público pide los cuatro años de prisión para el responsable del «Capitán Nemo», de 45 años de edad, porque le considera autor de un delito de homicidio imprudente, ya que este capitán de barco no paró la embarcación atrás para rescatar a los dos jóvenes, que se lanzaron por la borda voluntariamente, en estado de ebriedad y, según demostraron los análisis post mortem, tras haber consumido varios tipos de droga, al menos en el caso de Bourke.

En su escrito, el Ministerio Fiscal relata que aquel día «en una travesía que se iniciaba a las 19'00 horas, de cuatro horas de duración, y de regreso al puerto de Sant Antoni, dos amigos se retan a tirarse al agua, siendo que uno de ellos finalmente se lanza, a la altura de Port des Torrent, manifestando con posterioridad que fue rescatado por una embarcación, después de nada aproximadamente una milla, y que la embarcación en la cual viajaba [el «Capitán Nemo»] no se detuvo; posteriormente, tras reducir la velocidad, se lanza al agua otra persona (John Basile Bourke), en la creencia de que el capitán había dado permiso para que se tirasen al agua (le dijo a un compañero: «Aquí está mi cámara, que el capitán dice que podemos saltar». «El acusado, en calidad de capitán del barco», continúa el Ministerio Fiscal, «tiene conocimiento de los hechos, siendo que en ningún momento para la embarcación, ni busca a las personas que se arrojan al mar, ni realiza llamada alguna de socorro al servicio de Salvamento Marítimo». Por estas dos razones, la fiscal reclama también a José R.R. una multa de 9.000 euros por cada uno de los dos supuestos delitos de omisión del deber de socorro, es decir, 18.000 euros en total.

Además, según el escrito del Ministerio Público, «las personas que estaban en la embarcación solicitaron al capitán que parase, que dos personas se habían tirado al agua, haciendo éste caso omiso y continuando su viaje. Al llegar a puerto, limpió la embarcación y se fue, sin haber dado aviso tampoco a las autoridades de los hechos».

El cadáver de Bourke, de 24 años, fue hallado al día siguiente flotando en aguas de Port des Torrent.

Además de los cuatro años de cárcel y los 18.000 euros de multa, la fiscal también pide que José R.R. quede inhabilitado para el ejercicio de la profesión de patrón mayor de cabotaje por un periodo de cinco años por el delito de homicidio por imprudencia, además del pago de las costas del juicio que se celebrará próximamente en alguno de los dos Juzgados de lo Penal de la isla, después de que el caso haya sido instruido por Santiago Pinsachs, titular del Juzgado de Instrucción número 4.