J.J.M.
María Rosa P.B., la mujer que fuera compañera sentimental del ex alcalde formenterés Bartomeu Ferrer Marí, fallecido el 10 de febrero de 2005 después de estar un mes en coma, tendrá que sentarse en el banquillo el próximo día 19 para enfrentarse a cuatro años de cárcel por delitos de maltrato y muerte por imprudencia grave. Lo hará ante la responsable del juzgado de lo Penal número 2 de Eivissa, juzgado que finalmente tendrá que dirimir una causa que la familia de Ferrer Marí intentó que fuera vista por un jurado popular al entender que la acusada fue responsable directa del fallecimiento, hecho que hubiera elevado a homicidio la categoría del delito que a ésta se le imputaba. Todo ello, después de que ambos se citaran en casa de un amigo y se produjera una pelea que resultó fatal para el ex alcalde de Formentera.
Dos decisiones judiciales, una la del juzgado que instruyó la causa, el número 2 de Eivissa, y una posterior de la Audiencia Provincial, abortaron esta posibilidad. El juez José Espinosa, titular del juzgado que tomó declaración a María Rosa P.B. y que, a su vez, analizó todas las pruebas presentadas en el caso, consideró que no existía relación inequívoca entre un golpe recibido en la cabeza por la víctima y su muerte. Más adelante, la Audiencia Provincial, tras un recurso presentado por el abogado de la familia de Ferrer Marí, precisó que, a su juicio, no existió intencionalidad por parte de la encausada de causar la muerte de su ex pareja.
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