La embarcación fue encontrada varada en la coste este de Menorca.

J.L. GARCÍA/EFE
Una operación conjunta de la Guardia Civil y la Policía Local de Sant Lluís permitió ayer detener, a última hora de la mañana, a tres varones argelinos e identificarlos como los tripulantes de la patera que embarrancó durante la madrugada del pasado sábado en la costa de Binisafuller (Sant Lluís).

El arresto tuvo lugar cuando los tres detenidos procedían a embarcarse en el ferry que une Maó y Barcelona. Los hechos se sucedieron al comprobar los agentes de seguridad que uno de los apresados no portaba documentación alguna y otro contaba con una orden de expulsión pendiente y tramitada desde Logroño. El tercer integrante del grupo sí posee todos los papeles en regla.

Las alarmas saltaron en el levante menorquín cuando la ronda rutinaria de la Policía Local de Sant Lluís permitió comprobar -a las seis y media de la mañana- que en la costa de Binisafuller se encontraba una embarcación de nueve metros de eslora, -definida como patera en los primeros avisos realizados- varada en la costa.

Los restos presentes en la barca -garrafas de gasolina vacías, comida reciente, fruta fresca mantas, botellas de agua y medicamentos etiquetados en lenguaje árabe (con datos que permitieron concretar su relación con Argelia)- y todo ello permitió comprobar que se trataba de un vehículo tripulado que había sido abandonado de forma intencionada a su propia suerte.

El hecho de no contar con denuncia alguna por parte de los dueños del pequeño navío causó que desde un primer momento se organizará un dispositivo de vigilancia coordinado por la Guardia Civil para esclarece los hechos. En las operaciones participaron agentes del cuerpo judicial de la Benemérita, de la Policía Local de Sant Lluís y voluntarios de Protección Civil y Cruz Roja. Fue entonces cuando los cuerpos de seguridad recibieron instrucciones de vigilar el embarque de los buques regulares que atracan en los puertos de Maó y Ciutadella, lo que derivó en la detención de los tres inmigrantes argelinos. Fuentes de la Delegación de Gobierno de Balears confirmaron las detenciones y apuntaron que «todos los indicios nos llevan a conjeturar que los detenidos son los tres navegantes de la embarcación abandonada en las rocas de Binisafuller, aunque aún no hemos realizado todas las pruebas que los pueden unir con los hechos y han declinado confesar su culpabilidad... no podemos olvidarnos de la presunción de inocencia». A su vez desde la Delegación rechazaron cualquier conexión con una red de inmigración organizada. De confirmarse este suceso, se trataría de la primera patera que llega a las costas de Balears.