Bar propone al alcalde de Sant Josep «un paseo por las zonas calientes»

Bar ha hecho que público que a lo largo del verano -como también hizo la temporada pasada- ha realizado visitas de este tipo y ha mantenido encuentros con vecinos y propietarios de algunos establecimientos para estudiar la situación. «Los incumplimientos [de las ordenanzas municipales] por parte de los locales son el caldo de cultivo para problemas de delincuencia, por lo que propongo [al alcalde de Sant Josep] varios paseos a diversas horas por las zonas calientes», manifestó ayer Bar. La intención del director insular es lograr «la colaboración entre ambas administraciones y realizar un diagnóstico común para tratar de avanzar en las posibles soluciones». Bar asegura que la Guardia Civil patrulla constantemente la zona y piensa que «lo ideal» sería que en este trabajo también colaborase la Policía Local de Sant Josep, «petición que ha sido reiterada por parte de la Guardia Civil con motivo de la incidencia de determinadas situaciones». Vecinos y comerciantes de Platja d'en Bossa han denunciado varias veces situaciones muy violentas vividas en una zona concreta de Platja d'en Bossa y el caos que se forma en este lugar del municipio de Sant Josep.

«No cabe duda», señalan en un comunicado desde la Dirección Insular, «de que los principales problemas vienen agravados por los excesos que se producen por el abuso o la omisión de normativas de ámbito municipal; son muy destacables los establecimientos que realizan actividades ultrapasando lo que establecen sus licencias, ya sea en el tipo de actividad, los aforos, los ruidos, la suciedad generada, la invasión de espacios públicos, los botellones en las calles y las playas, etcétera». Bar asegura que la permisividad con las vulneraciones de las ordenanzas municipales favorece «altercados violentos, menudeo de droga, hurtos...». Dirección Insular «mantiene la firme convicción de que la tolerancia con estas situaciones sólo puede fomentar el incremento de un tipo de afluencia incívica que perturba gravemente los atractivos que la zona puede ofrecer para un turismo familiar y de más calidad y perjudica también sobremanera a los establecimientos comerciales allí ubicados, así como a los vecinos del lugar».