Algunas de las prendas y complementos recuperados por la Guardia Civil.

Los ocho detenidos, cuatro hombres y cuatro mujeres, la mitad de los cuales operó en Eivissa, llegaron a Balears a mediados de mes directamente desde Moscú.Según la investigación de la Benemérita, montaron su base en el municipio mallorquín de Santany. La mitad de ellos viajó pocos días después de su llegada a Eivissa, lugar donde los integrantes de la banda utilizaron el mismo modus operandi que ya era objeto de pesquisas en Mallorca. El grupo ibicenco estaba formado por tres hombres y una mujer que ingresaron anteayer en prisión.

Los asaltantes, especializados en sustraer prendas de primeras marcas de las que se han podido recuperar artículos por valor de 60.000 euros, no sólo entraban en comercios con bolsas preparadas para eludir los dispositivos de alarma. Los agentes se han encontrado con un nuevo método, radicalmente distinto al anterior, ya que la banda también hacía saltar las alarmas para desvalijar las tiendas aprovechando la confusión.

Según informó el instituto armado, los sospechosos, todos ellos con edades comprendidas entre los 25 y los 50 años, iban equipados con un dispositivo metálico laminado difícil de detectar que colocaban entre las hojas de un periódico o una revista. Tras hacer saltar las alarmas, el grupo, que operaba coordinadamente en un establecimiento elegido, se lanzaba al unísono a introducir todas las prendas posibles en las bolsas preparadas para alojar estos efectos.

Los ladrones se apoderaban sobre todo de prendas de vestir y complementos de moda como gafas, relojes o zapatos.