AGENCIAS-TORONTO-CANCÚN
Las dos canadienses a las que la policía mexicana ha identificado como sospechosas en el asesinato de dos compatriotas en el hotel 'Barceló Maya Beach' en la Riviera Maya, la semana pasada, proclamaron ayer su inocencia en una conferencia de prensa. Kimberly Kim y Cheryl Everald se encontraban en el hotel de la cadena Barceló, en el que también se hospedaban el matrimonio formado por Doménico y Annunziata Ianiero, quienes habían viajado a la localidad turística para asistir a la boda de una de sus hijas. Las autoridades mexicanas declararon que hallaron restos de sangre en dirección a la habitación contigua a la que ocupaban los Ianiero e identificaron a las dos sospechosas con los apellidos King y Everald similares a las de las dos ciudadanas canadienses. El procurador de Quintana Roo, Bello Melchor Rodríguez Carrillo, también afirmó al inicio de la investigación que el matrimonio, que apareció degollado, había sido asesinado por profesionales que abandonaron el hotel tras cometer el crimen. Kim y Everald declararon ayer que dejaron el hotel la semana pasada sin tener idea de los asesinatos y sólo porque era la fecha programada de su salida. Las dos mujeres, residentes en la ciudad de Thunder Bay, son madres de dos niños. El abogado de las dos canadienses, Lee Baig, criticó a las autoridades mexicanas que investigan el caso. En una entrevista emitida por la televisión CTV, Baig dijo que «estoy habituado a lo que considero investigaciones policiales apropiadas y ésta no parece ajustarse en esa categoría, particularmente porque la escena del crimen no fue asegurada». También ayer, dos de los principales periódicos del país lanzaron graves críticas contra las autoridades mexicanas y especialmente el procurador Rodríguez Carrillo. Bajo el título de «El lío de México», el periódico más influyente del país, «The Globe and Mail», dedicó un editorial al caso en el que afirma que hay suficientes evidencias para «sospechar que las autoridades mexicanas han dañado seriamente la investigación. Lo que es peor, hay razones verosímiles para creer que se han inventado sospechosos para preservar su propio vital sector turístico». El periódico «Toronto Star», el de más circulación del país, recogía ayer en portada acusaciones de corrupción contra Rodríguez Carrillo vertidas, entre otras, por el periódico mexicano «La Reforma» que le acusa de quedarse con bienes afectados por el huracán «Wilma» que afectó Quintana Roo el pasado mes de octubre. El diario también recoge acusaciones contra Rodríguez Carrillo en el sentido de que permite torturas sobre sospechosos para extraer confesiones. Mientras, las autoridades mexicanas han mantenido silencio en torno al asesinato. Angel López Campos, de la procuraduría de Justicia del estado caribeño de Quintana Roo, indicó que Canadá le pidió a las autoridades mexicanas que enviara los restos de las víctimas a su patria. Las órdenes, indicó, son que no se hagan comentarios sobre el crimen. El domingo, las autoridades iban a declarar ante los medios sobre sus investigaciones, pero no lo hicieron. Previamente, dijeron a los medios locales que se sospechaba de dos mujeres canadienses que estaban en el mismo hotel de las víctimas, y que salieron al mismo tiempo en que fueron encontrados los cadáveres. Eduardo Espinosa, secretario de Gobernación, dijo que se invitó a investigadores canadienses a participar en las pesquisas.