Los destrozos en el faro fueron cometidos en la noche del pasado miércoles. Foto:G.R.

J.A.E.T., de 35 años y vecino de Formentera, ya es un hombre condenado por destrozar a mazazos la semana pasada las instalaciones del faro del Cap de Barberia. Él mismo, pese a sus dimes y diretes, terminó confesándose ante el juez autor de los actos vandálicos que se le imputaban después de que la Guardia Civil le pusiera a disposición judicial. Como se recordará, el faro, pese a los desperfectos que sufrió el cuadro de mandos, no llegó a dejar de emitir su luz gracias al sistema de emergencia que las instalaciones disponían.

El sospechoso quedó libre el mismo viernes después de que su confesión permitiera, gracias a la modalidad de juicios rápidos, llegar a una sentencia de conformidad. En ella se recogerá que J.A.E.T., un hombre muy conocido en Formentera por sus actividad profesional y sus antecedentes policiales, deberá abonar una multa de 600 euros, cantidad a la que habrá que sumar al menos otros 2.700 euros por los destrozos ocasionados en el edificio del faro. El acusado se enfrentaba en un principio a una pena de seis meses multa, con una cuota diaria de cinco euros, además del pago de la indemnización correspondiente por los destrozos localizados en el faro. Su reconocimiento expreso ante el juez, salvando con ello la posibilidad de que hubiera que fijar fecha para juzgar el caso en una semana, permitió que se redujera a cuatro meses la multa, que quedó, así, en 600 euros.

La Autoridad Portuaria, por su parte, y a falta de un peritaje definitivo, ha valorado en principio en 2.700 euros los desperfectos en las puertas, así como en el sistema de refrigeración y en la instalación eléctrica del faro. J.A.E.T., que contaba con seis detenciones anteriores, forzó las puertas del faro e irrumpió en él entre las nueve y las diez de la noche del pasado miércoles, hecho que, al parecer no pasó desapercibido para un vigilante. El sospechoso logró huir de la Guardia Civil campo a través pero al día siguiente fue arrestado. A esta misma persona se le había relacionado en otras ocasiones con actos vandálicos similares que se cometieron en la isla sin justificación alguna.