Aparentemente no hay españoles entre los ocho muertos, pero sí
tienen nacionalidad española tres de los heridos, cuyas vidas no
corren peligro, según fuentes oficiales francesas y consulares. De
acuerdo con los primeros datos ofrecidos por la Prefectura
(delegación del Gobierno) de Gironda, los ocho muertos son siete de
los ocupantes del autobús -seis mujeres y un adolescente de 14
años- y el conductor marroquí de una furgoneta que, según los
indicios iniciales, estuvo en el origen del siniestro.
La mayor parte de los viajeros del autocar eran portugueses,
según las autoridades. El cónsul español en Burdeos, José Gabriel
Núñez, señaló que tres de los heridos tienen nacionalidad española
y que hay «muchas probabilidades de que no haya ningún» español
entre los muertos, si bien matizó que está aún por confirmar. Por
ahora, según la Prefectura, sólo el conductor de la furgoneta ha
sido formalmente identificado, pero el cónsul de Portugal en
Burdeos ha indicado que los otros siete muertos son
portugueses.
Los heridos -además de los 12 en estado de suma gravedad, hay
más de una treintena graves y el resto leves- fueron trasladados
por la mañana desde el lugar del siniestro, cerca de la localidad
de Belin-Beliet, a hospitales de Burdeos y Arcachon. Los tres
heridos españoles están ingresados en el hospital de Burdeos, según
el cónsul español que visitó a dos de ellos por la mañana y tenía
previsto hacer lo propio con el tercero por la tarde.
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