La Guardia Civil se ha encargado de investigar los dos casos para aclarar lo ocurrido.

El presunto violador que ha sido detenido, un joven inglés de 30 años, fue localizado anteanoche por agentes de la unidad de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Eivissa menos de un día después de que la joven que dijo haber sufrido la agresión, una chica británica de 23 años, presentara la denuncia.

Las gestiones emprendidas por el instituto armado se concretaron sobre las once de la noche tras encontrar en Santa Eulària al turista que, según las pistas recabadas durante la investigación, cometió presuntamente la violación de la que dijo ser víctima en la madrugada del viernes una joven dentro de la misma localidad de Sant Antoni.

Los agentes se encontraron con este caso cuando intentaban avanzar en otro investigación por una agresión sexual, la ocurrida durante la madrugada del miércoles y de la que fue víctima otra turista, una chica de 21 años de nacionalidad noruega, hecho del que ya informó este periódico.

Los agentes tratan desde entonces, tras haber llevado ya a cabo múltiples comprobaciones, de hallar algún dato fidedigno que lleve hasta el hombre, posiblemente otro turista, que abandonó en el campo a la afectada. La joven, como sucedió en el caso anterior, conoció a su agresor durante una noche de copas en el West End. Ésta, muy bebida y completamente desorientada, se despertó al amanecer en el monte. Fue recogida en la carretera cuando pedía ayuda a los vehículos que pasaban Tras ser atendida por la Policía Local de Sant Josep e informada la Guardia Civil, la víctima fue asistida en Can Misses, hospital donde se confirmó el alcance de las lesiones que sufría a causa de una supuesta violación.