El autocar de la empresa Island Bus que anteayer al mediodía se vio implicado en una colisión a 800 metros del cruce de Sant Rafel sufrió este accidente después de que el conductor de una furgoneta que circulaba en dirección contraria perdiera el control y se estrellara contra el autobús, según aclaró ayer Miguel Costa, consejero delegado de esta firma.

Costa explicó que, según el parte que se elaboró tras el siniestro, el autocar afectado se dirigía hacia Sant Antoni para dejar a sus ocupantes en un hotel. La furgoneta que terminó colisionando contra el autocar circulaba en dirección Eivissa cuando por causas que se desconocen, con el firme mojado por la lluvia, su conductor frenó y patinó en la calzada. La furgoneta impactó seguidamente contra el lado de la puerta del conductor y arañó toda la parte lateral en su trayectoria, aclaró Costa. Al parecer, otro coche que iba detrás del autobús logró esquivar a la furgoneta. El siniestro se saldó sin que hubiera heridos.