El condenado respondió ayer en los juzgados de Eivissa por amenazas y tenencia ilícita de armas.

Una juez condenó ayer a un hombre a una pena de un año y medio de cárcel por entrar armado en un bar y amenazar a un cliente del mismo. El condenado aceptó la pena solicitada por el fiscal, que coincidió con la sentencia dictada por la magistrada de los juzgados de Eivissa.

En estado de ebriedad, tal y como reconoció la defensa, J.R.Y.R., de unos 50 años, entró armado en el bar Can Bufí, situado en la carretera de Sant Antoni frente al Instituto de Blanca Dona y en las cercanías del polígono industrial del mismo nombre.

Según los hechos admitidos por la defensa, el condenado portaba un arma de fuego corta (una pistola) y amenazó a uno de los clientes que en ese momento se encontraban en el interior del bar Can Bufí, un establecimiento al que acostumbran a acudir los trabajadores de las empresas ubicadas en el polígono industrial colindante.

La magistrada consideró que estos hechos, ocurridos el año pasado, son merecedores de dos penas de privación de libertad, ya que el condenado incurrió al menos en dos delitos, uno por tenencia ilícita de armas y otro por amenazas. .