El Sindicato Unificado de Policía (SUP) ha iniciado una campaña para denunciar el «agravio salarial» con otras policías y elevará una propuesta al Gobierno que resulte de las elecciones para discutir mejoras laborales, a la vez que amenaza con medidas de presión si el nuevo Ejecutivo no se aviene a negociar. Si el Gobierno no acepta la negociación, el SUP convocará medidas de presión para el otoño, que irían desde el boicot a los actos conmemorativos del Día de la Policía o el abandono del Consejo de Policía hasta una manifestación en Madrid que podría celebrarse los días 16 ó 17 de octubre.

Según el documento elaborado por el SUP para su campaña informativa, al que ha tenido acceso Efe, este sindicato culpa del «agravio salarial» existente tanto a los gobiernos de Felipe González como a los de José María Aznar, que «hasta ahora han carecido de voluntad política» para resolver esa situación.

El SUP propone la elaboración de un calendario «que conduzca a la equiparación salarial efectiva entre los miembros del Cuerpo Nacional de Policía y el resto de policías del Estado español». Además, exige que se resuelva la situación de «castigo» que supone el pase obligatorio a la segunda actividad, «que conlleva una considerable reducción salarial», así como una reforma del Código Penal de 1995 que «agravó» las condenas a los miembros de las fuerzas de seguridad en el ejercicio de sus funciones. Aboga también por la modificación de la actual estructura del Cuerpo, por el establecimiento de una jornada laboral «racional» con compensaciones por trabajar noches y festivos, asistir a juicios o realizar servicios extraordinarios.