Una familia de Formentera perdió ayer sus tres coches en un incendio aparentemente fortuito que se declaró de madrugada en la parte trasera de un inmueble del Camí de ses Vinyes de Sant Ferran y que se saldó también con dos motos calcinadas y un cuarto turismo afectado por las llamas.

Los tres coches quemados, un Citroën Xsara Picasso, un Daewoo Lanos y un Fiat Panda, entraron en llamas sin que sus propietarios pudieran hacer nada para evitarlo pese a que una de estas personas intentó parar el avance del fuego con un extintor. Las primeras hipótesis apuntan a la posibilidad de que un vecino que llegó a la vivienda dejara la moto en equilibrio inestable sin que se apercibiera de ello y que ésta cayera al suelo, derramando la gasolina del depósito. según esta misma línea de investigación, fue entonces cuando el combustible pudo prender al entrar en contacto con el motor aún caliente. Sin embargo, un hecho que ha despertado algunas dudas es que en la inspección ocular se descubrió que el caballete de la moto estaba bien situado. Esto, pese a todo, no ha desvirtuado la impresión de que fue un accidente.