Dos jóvenes de la isla se enfrentan a tres años de cárcel después de que hayan sido procesados por el accidente mortal que sufrió hace dos años una motorista en es Canar.

Elisabeth Navarro, de 19 años, pereció en el acto en la madrugada del 14 de julio de 2001 en la carretera de es Canar después de que primero impactara un coche contra el ciclomotor que conducía y en su caída se viera arrollada por otro. Ambos coches iban a cien por hora. Murió a muy pocos metros de la casa de sus padres en es Canar, el lugar donde se dirigía cuando tuvo lugar el trágico siniestro sobre las dos de la madrugada.

Los dos conductores que se vieron implicados en el siniestro, dos jóvenes amigos que recogían sus respectivos vehículos para irse de copas y que además conocían a la víctima, se sentaron ayer en el banquillo acusados de un presunto delito de imprudencia. Las acusaciones particulares les piden tres años de cárcel, otros cuatro de retirada del carnet e indemnizaciones próximas a los 80.000 euros.

Dicho cargo se fundamenta en la posibilidad de que los dos imputados fueran a velocidad excesiva y el segundo de ellos no respetara la distancia de seguridad.

El agente de Tráfico que instruyó el atestado declaró ayer en la vista oral que la zona donde ocurrió el siniestro contaba con una señalización especifíca que impedía superar los 50 kilómetros por horas al entenderse como vía urbana. Asimismo señaló que la frenada que se registró de hasta 60 metros evidenciaba la alta velocidad a la que iban los coches involucrados

Los dos acusados, que reconocieron ir a una velocidad de al menos cien kilómetros por hora en la carreter anterior que une es Canar con Santa Eulària, sin embargo, afirmaron que no pudieron hacer nada para evitar el accidente. El primero de los conductores explicó que todo ocurrió en 3,6 segundos al encontrarse de súbito con dos ciclomotores que circulaban en paralelo y a velocidad muy reducida y en una zona de escasa iluminación por no estar encendias cuatro farolas que había en este tramo.