Los comerciantes de la isla se enfrentan a una nueva oleada de falsificaciones. En las últimas semanas se han detectado en Eivissa, Sant Antoni y Santa Eulària varios billetes falsos de 20 y 50 euros.

Ayer, agentes de la Policía Local de Eivissa detuvieron en el interior de la discoteca Pachá a un joven italiano que pagó su cuenta en dos barras de esta sala de fiestas con seis billetes falsos de 50 euros.

Se trata de P.A., nacido en 1978 y natural de Salerno, en la isla de Sicilia, que en el momento de su detención estaba indocumentado. Los responsables de Pachá llamaron a la Policía Local cuando advirtieron que este joven italiano había entregado los seis billetes falsos. Al parecer, el encargado de la discoteca notó sin género de dudas la falsedad de los billetes.

Según la policía, las diferencias más notorias son que en los billetes falsos el número 50, que es lila, no cambia de color. Además, una de las caras de las falsificaciones destiñe, el quinegrama del anverso es de peor calidad y el hilo de seguridad se percibe como pintado.

Recientemente, varios comerciantes de Sant Antoni y Santa Eulària han encontrado en sus cajas registradoras billetes falsos de 20 euros. Las diferencias entre estas falsificaciones de 20 euros y los billetes reales son similares a las que se observan en los billetes de 50. Pero en el caso de los billetes de 20 euros el tinte -de color azul- y el papel son de mala calidad, lo que facilita su detección.

Fuentes policiales explicaron que el papel moneda europeo es uno de los más difíciles de falsificar, lo que por otro lado no garantiza completamente la introducción en el mercado de falsificaciones de calidad.

«Los diferentes billetes de euro son mucho más difíciles de falsificar que los dólares, por ejemplo, pero esto no desanima a los falsificadores, que cada vez disponen de medios más sofisticados para hacer su trabajo», apuntaron.