La delegada del Gobierno en las Pitiüses, Marienna
Sánchez-Jáuregui, envió ayer un mensaje al concejal de Gobernació
del Ayuntamiento de Eivissa, Leopold Llombard: «Los vecinos de la
Marina, de sa Penya y del Puerto me han dicho que en sus barrios se
nota la presencia de los agentes del Cuerpo Nacional de Policía y
que casi no ven a agentes de la Policía Local».
De esta forma, Sánchez-Jáuregui sale al paso de las recientes
acusaciones que vertió Llombard, que dijo que Sánchez-Jáuregui y el
comisario Angel Marí habían incumplido lo acordado en la última
Junta de Seguridad de Eivissa, donde ambos dijeron que los agentes
del Cuerpo Nacional de Policía se encargarían de patrullar a lo
largo de las 24 horas del día en estas zonas de la capital
pitiusa.
Sánchez-Jáuregui se reunió ayer con representantes de las
asociaciones vecinales de estos barrios, entre quienes, según dijo
la delegada del Gobierno tras el encuentro, «aún siguen sin la
tranquilidad y la seguridad que desean a pesar del aumento de la
presencia policial».
Sánchez-Jáuregui dijo que ha prometido a los vecinos que se va a
mantener esta presencia policial especial a lo largo de toda la
temporada y que, además, llegará un grupo especializado para
reforzar la vigilancia.
En cuanto a la dialéctica entablada entre el concejal de
Gobernació [responsable político de la Policía Local de Eivissa] y
el Cuerpo Nacional de Policía, Sánchez-Jáuregui dijo que «a los
vecinos les irrita ver que nos pasamos la pelota porque ellos lo
único que quieren es que se resuelvan sus problemas». Las
asociaciones vecinales de la Marina han denunciado un aumento del
tráfico de drogas en este céntrico barrio eminentemente
comercial.
La delegada del Gobierno en las Pitiüses, Marienna
Sánchez-Jáuregui (PP), solicitará audiencia la próxima semana con
el alcalde de Eivissa, Xico Tarrés (PSOE), con el fin de recordarle
al primer edil de la capital que es necesario atender las
necesidades de los barrios de la Marina, sa Penya y el Puerto.
Sánchez-Jáuregui solicita esta reunión a petición de varios
representantes vecinales de estos barrios, que -según dijo la
delegada- coinciden con ella en comprender que la presencia
policial es necesaria para acabar con la delincuencia, pero que
también resultan imprescindibles «adoptar medidas a medio plazo
para solucionar los otros problemas». Con esta expresión, Sánchez
Jáuregui hace referencia a los «problemas sociales» que aquejan a
estas tres zonas de la ciudad, «que son temas que debe solucionar
el Ayuntamiento». Para la delegada del Gobierno en Eivissa y
Formentera, los problemas de urbanismo y limpieza que padecen estos
barrios son un caldo de cultivo propicio para que se desarrolle la
delincuencia, por lo que la única solución a este problema pasa por
estrategias a medio y largo plazo.
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