La embarcación fue remolcada hasta el puerto de Eivissa después de que sus tripulantes fueran rescatados por otra nave. Foto: K.TABERNER

Cerca de tres horas estuvo activo un operativo de salvamento que ayer tarde movilizó a diversas fuerzas, entre ellas a Cruz Roja y Guardia Civil, al aparecer una lancha a la deriva junto al la Illa Negra, frente a los acantilados de Dalt Vila, y temerse por la vida de sus tripulantes. Las sospechas era aún mayores al constatarse que la motora tenía graves desperfectos al haberse estrellado contra el citado islote.

Sus dos tripulantes, sin embargo, salieron indemnes del percance. Según la información recogida por este periódico, ambos, una pareja de franceses, saltó al agua antes de la colisión y fueron recogidos por una embarcación. Salvamento, sin embargo, no tuvo conocimiento de este rescate hasta horas después.

La alarma se activó en el Centro Regional de Salvamento Marítimo poco después de las tres de la tarde al informarse de la existencia de un posible naufragio en las cercanías del puerto de Eivissa. Inmediatamente se movilizó una embarcación y una moto acuática de Cruz Roja.

Los efectivos de Cruz Roja peinaron la zona cercana a la Illa Negra tras recuperar la motora siniestrada. Al mismo tiempo salía del puerto la salvamar «Illes Pitiüses» y un poco más tarde se movilizaba al Grupo especial de Actividades Subacuáticas (Geas) de la Guardia Civil al temerse ya que hubiera pasado lo peor. Todo quedó aclarado sobre las seis de la tarde después de que el Centro Regional de Salvamento recibiera una comunicación de una embarcación, al parecer de las destinadas a crucero, que relataba la recogida de los náufragos.