La Audiencia Provincial vio ayer tres casos de jóvenes que fueron
detenidos con pequeñas cantidades de estupefacientes y que fueron
apresados como consecuencia de servicios de control llevado a cabo
por la Guardia Civil. Dos de ellos, en concreto fueron capturados
gracias a los dispositivos de vigilancia en las entradas de la
isla.
Un joven catalán, que en un principio se enfrentaba a cinco años
de cárcel, aceptó una pena de tres después de que fuera juzgado
como consecuencia de los 22 éxtasis que la Benemérita le intervino
el año pasado cuando agentes de este Cuerpo intervenían en las
inmediaciones de un 'afterhours' ubicado en la zona de Platja d'en
Bossa. El acusado tendrá que pagar una multa de 719 euros y ello
permitirá que la condena de cárcel quede en suspenso, según le
informó el tribunal tras informarle de la sentencia que se le
impondrá.
La Audiencia también resolvió con sentencias de conformidad el
caso de un joven catalán, que se jugaba otros cinco años, detenido
en el aeropuerto con 80 éxtasis en un dispositivo que contó con la
presencia del servicio Cinológico del instituto armado, así como
con otro sospechoso apresado ene le puerto de Eivissa tras
desembarcar con 76 éxtasis. Los guardias también se incautaron de
medio gramo de ketamina y de otro medio gramo de cocaína.
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