La sentencia por la que se condena de dos delitos de homicidio
imprudente a Javier Calbet Tur, de 34 años de edad y conductor del
BMW que se estrelló en la carretera de Jesús el 24 de febrero de
2001 contra el turismo Daewo Lamos en el que iba Pilar Adán López,
matando, a su vez, a Rafael Moll Tur, pasajero del anterior
vehículo, recoge como probado que el siniestro se produjo por la
negligencia del acusado.
Así, Javier Calbet Tur, condenado ahora a dos años de cárcel y a
un año y medio de prohibición para conducir,iba a «velocidad
notablemente superior a la necesaria para poder en todo momento
controlar el vehículo dado que el asfalto se encontraba mojado». A
este argumento la juez del juzgado de lo Penal número 1 de Eivissa,
responsable de la sentencia, añade que el acusado «conocía dicha
carretera y ese tramo en particular, sabiendo que el asfalto estaba
mojado, que la anchura de la calzada era de 6'05 metros y que
carecía de zonas laterales de protección encontrándose la velocidad
limitada a 40 km/h».
Estas son las principales razones por la que se impone al
acusado penas de un año de prisión por cada uno de los delitos de
homicidio por imprudencia grave que se le imputaban. La juez, sin
embargo, en la causa, ha aplicado la circunstancia atenuante de
reparación del daño por el pago realizado por las aseguradoras. La
sentencia, sin embargo, no recoge ningún argumento, ni hace
mención,sobre la validez de un informe médico en el que al parecer,
se hacía referencia al posible consumo de cocaína del acusado y
que, según la información recogida en su día por este periódico,
llegó a ser presentado durante el proceso.
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