A. VICENÇ
El fallecimiento de un operario que se electrocutó el sábado cuando retiraba con un camión-grúa diversos árboles caídos en una casa de campo de Pollença eleva a cinco las muertes relacionadas con los efectos de los pasados temporales de viento y lluvia que asolaron Balears el mes de noviembre.

Ramón March Nadal, de 37 años, murió a las cuatro y media de la tarde en una finca próxima a la urbanización del Vilà, en la zona del Port de Pollença, cuando el vehículo que utilizaba para recoger árboles y ramas caídas durante los pasados temporales se acercó a un cable que le provocó una descarga eléctrica de 15.000 voltios.

El centro de emergencias del 112, la Policía Local y la Guardia Civil fueron informados del suceso y una ambulancia intentó sin suerte reanimar al trabajador. El fallecido, que estaba casado y tenía dos hijos, era vecino de Pollenca y trabajaba como autónomo con un camión grúa. Esta nueva muerte eleva a cinco las relacionadas con los temporales del mes pasado.