Uno de los arrestados, ayer, a la entrada al juzgado de guardia. Foto: V.F.

Cinco personas, al menos cuatro de ellos familia, han sido detenidos por la Guardia Civil en una operación que se ha llevado a cabo en Santa Eulària y que ha servido para poner al descubierto el entramado de tráfico de cocaína que, de manera organizada, habían formado los sospechosos. Se da la circunstancia que dos de ellos ya fueron detenidos por lo mismo a finales del año pasado y que, una vez puestos a disposición judicial y libres, no tuvieron reparos en continuar con sus actividades de venta de drogas, según se desprende de lo que ha trascendido de la investigación que ha cumplimentado el Grupo de Investigación Fiscal y Antidroga (GIFA).

La red utilizaba como base un céntrico bar de la localidad de Santa Eulària, pero este establecimiento sólo era una pieza importante del entramado. Este estaba formado supuestamente por los ibicencos J.A.P.C, de 28 años, J.L.C.R. de 29, la vecina de Santa Eulària, M.C.F., de 59 años, y su marido, de la misma edad, J.P.C.; éste último natural de la localidad pacense de Castuera al igual que el joven J.P.C., de 27 años.

Cada miembro del grupo tenía su cometido a la hora de la planificación, la captación y la distribución de los estupefacientes. Este último aspecto se llevaba a cabo de distintas maneras, incluida las más audaces. Este periódico ha podido conocer que los traficantes utilizaban una moto acuático para llevar a cabo desplazamientos, principalmente desde la misma Santa Eulària a cualquier playa de la zona de es Canar.

La Benemérita informó ayer precisamente de la intervención de esta moto, así como dos vehículos valorados todos en su conjunto en más de diez millones de pesetas, así como 91 gramos de cocaína, una báscula de precisión y 200.000 pesetas. Las supuestas actividades que estaban llevando a cabo los detenidos estaban provocando una gran alarma social en Santa Eulària, máxime cuando era público que al menos el principal encausado, J.A.P.C., hacía ostentación de su presunta condición de traficante pese a conocerse que ya había sido detenido en una ocasión, vez que se le requisaron también cerca de cien gramos de «coca».