Más de 5.000 kilos de hachís interceptados y nueve personas
detenidas es el balance de las diversas operaciones antidroga
realizadas por la Guardia Civil durante la madrugada de ayer en
Cádiz y Málaga.
En la primera de ellas, el Servicio Marítimo de la Guardia Civil
interceptó en las inmediaciones de Cabo Roche, en el municipio
costero de Conil de la Frontera (Cádiz) unos 3.000 kilos de hachís
en dos operaciones diferentes en las que fueron detenidas seis
personas. En la citada zona la Benemérita detectó en el radar el
eco que resultó ser una embarcación deportiva rápida. En esta
embarcación se calcula que se transportaban unos 2.800 kilos de
hachís.
También en la misma zona, una patrulla de tierra de la Guardia
Civil intervino once fardos, dos de ellos en un vehículo
todoterreno, que contenían unos 250 kilos de hachís, aunque no hubo
detenidos, ya que los contrabandistas se dieron a la fuga.
En Málaga, tres personas fueron detenidas y 2.205 kilos de
hachís intervenidos en sendas operaciones desarrolladas por la
Guardia Civil en playas de las localidades de Marbella y Estepona.
La primera de las operaciones se saldó con la detención de los tres
ocupantes de una embarcación y el decomiso de 36 bultos de hachís
que contenían 1.200 kilogramos. La otra operación se desarrolló en
la playa de la urbanización Guadalmina Baja, de la localidad de
Estepona, en la que la Guardia Civil aprehendió treinta bultos de
hachís con un peso de 1.005 kilogramos. La droga fue interceptada
cuando los agentes avistaron una embarcación que llegaba a la
playa, si bien los ocupantes se dieron a la fuga y no pudieron ser
localizados.
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