Agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local de Sant Josep se personaron durante la mañana de ayer en la zona de Platges de Comte para detener una fiesta ilegal que se estaba celebrando en aquel lugar.

Según fuentes consultadas por este periódico, la fiesta dio comienzo la noche del pasado sábado. Numerosos vecinos de la zona llamaron a la Policía Local para quejarse por el alto volumen de la música y el ruido que estaban provocando los asistentes.

A las once de la mañana de ayer, los agentes de ambos cuerpos se dirigieron a ese lugar de la costa de Sant Josep y la Benemérita procedió a precintar los equipos de música allí instalados y a suspender la fiesta, abriendo las oportunas diligencias. La pasada semana tuvo lugar un hecho similar, aunque en este caso en Cala Llentrisca, zona declarada Àrea Natural d'Especial Interés (ANEI). Los vecinos también se quejaron de la alta aglomeración de gente que provocó la fiesta y presentaron una denuncia ante los Juzgados de Eivissa.

Los promotores de la celebración en Cala Llentrisca tenían previsto celebrar otra fiesta en los siguientes días, al parecer, en la Serra d'en Vedell, en es Cubells.