Momento en el que el cuerpo del pescador es trasladado a Pompas Fúnebres. FOTO: V. F.

Los restos humanos que supuestamente pertenecen a Miguel Angel Ruzafa Fons, el pescador alicantino de 33 años desaparecido el pasado mes de marzo en el naufragio del «Tanit I», fueron encontrados ayer poco después de que los agentes del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil (GEAS) volvieran a hacerse a la mar en lo que ya era el sexto día de rastreo consecutivo en los fondos de sa Conillera.

Los buceadores de la Guardia Civil contaron en esta ocasión con el apoyo de submarinistas de dos clubes privados, «La Sirena» y el «Rumbo Azul». El cadáver apareció poco después de las diez y media de la mañana a 45 metros de profundidad y en una ladera cuando ya se rastreaba prácticamente la última cuadrícula de una amplia pero concreta zona que había sido acotada. En ese momento, doce personas, entre los submarinistas de la Benemérita y los voluntarios de los clubes privados, peinaban la zona de búsqueda que se había establecido para hoy.

Los GEAS, si la tarea de ayer hubiera sido infructuosa, tenían previsto reanudar de nuevo hoy la búsqueda, como habían hecho hasta ahora y si era preciso desde el principio, la punta del islote donde un turista francés afirmó el pasado domingo haberse topado con un esqueleto cubierto de unas ropas. La zona, localizada a menos de una milla donde descansaba el «Tanit I» , fue acotada y cuadriculada por la Benemérita para facilitar un peinado exhaustivo. Los restos hallados fueron llevados al puerto de Sant Antoni, lugar donde sobre la una de la tarde se procedió a su levantamiento con la presencia del juez de guardia y de los forenses.