Dos jóvenes de Formentera, pendientes de juicio desde 1992, fecha en que fueron acusados de protagonizar once robos en la isla, entre ellos el asalto a varias casas y la sustracción de armas de fuego, así como de munición, lograron una sustancial rebaja de las penas que pedía para ellos la fiscalía.

José Amancio Escandell Tur, para el que se pedían penas de hasta trece años de prisión, aceptó ayer ante la Audiencia Provincial cumplir una condena de un año y ocho meses por el delito de robo continuado y otros cinco meses por tenencia ilícita de armas.

El otro implicado, Jaime Juan Costa, procesado con seis años y diez meses en juego, logró que la condena quedara reducida a diez meses por el delito de robo continuado al que hubo que sumar otros tres meses por la tenencia ilícita de armas. Al acuerdo se llegó ayer en Eivissa después de que la Fiscalía y los abogados defensores negociaran en secreto durante más de media hora.

El tribunal había citado para la ocasión a cerca de 25 testigos, la mayor parte de ellos extranjeros residentes en Formentera que fueron víctimas de los robos. La Audiencia también citó a cuatro policías locales y a expertos de la Guardia Civil en armas. El pacto alcanzado por las partes personadas evitó a todos ellos entrar en la sala para declarar ante la mesa de la Sección Primera.