Okupación

Temor entre los vecinos de Dalt Vila tras la okupación y el aumento de la inseguridad

El alcalde de Vila, Rafa Triguero, exige al Gobierno central «actuaciones urgentes» para evitar el «efecto llamada» a la okupación que se está produciendo en la isla en las últimas semanas

Los vecinos Toni, Miriam, Manuel y Mayra denuncian el aumento de la inseguridad en el barrio . | Alejandro Mellon

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La preocupación entre los vecinos de Dalt Vila era palpable ayer tras la okupación vivida este martes en una vivienda de la zona. Una situación que ha incrementado el clima de inseguridad que llevaban padeciendo en los últimos meses debido al aumento de robos y de puntos de venta de drogas en el barrio.

En este sentido, y tras lo sucedió en el inmueble de la calle Narcís Puget Viñas, vecinos de Dalt Vila han alzado la voz ante la creciente sensación de desprotección que sienten. Según relataron ayer a Periódico de Ibiza y Formentera, cada vez es más frecuente ver a «maleantes y yonquis» deambulando por el barrio, especialmente durante la noche.

«Antes vivíamos todos tranquilos, ahora estamos más preocupados», afirmó Mayra, una de las vecinas afectadas. Otros residentes del barrio también coincidieron en que la presencia de okupas y puntos de venta de droga en la Plaça de Vila ha aumentado, generando un ambiente de inseguridad constante.
«Nos conocemos todos, llevamos años viviendo aquí y nunca habíamos vivido algo similar», subrayó esta mujer, junto a los vecinos de la zona Toni, Manuel y Miriam.


Más delitos

Otros afectados del barrio antiguo de la ciudad también explicaron que en los últimos años se han producido más intentos de okupación en otras viviendas cercanas. Es el caso de un inmueble ubicado en la calle Antoni Costa Ramon, que intentaron allanar cuando la propietaria no estaba dentro de su casa.

En esta línea, los vecinos también denunciaron ayer el incremento de robos en locales y domicilios de la zona. «Han intentado entrar en restaurantes, forzando puertas durante el invierno», señaló un residente, mientras una vecina explicaba que una persona logró entrar en un domicilio mientras los dueños estaban dentro y robó la cartera de uno de ellos.

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«Debido a estas situaciones, hemos reforzado las medidas de seguridad en nuestras viviendas», apuntó, lamentando con preocupación que este barrio ha dejado de ser una zona totalmente segura para los residentes. Cabe recordar que la alarma vecinal se activó este martes cuando varios residentes advirtieron la luz de una linterna utilizada por el okupa que había allanado la vivienda en la calle Narcís Puget Viñas.

En este sentido, según informó el director técnico de la Policía Local de Vila, Julián Córdoba, los agentes acudieron al lugar tras recibir el aviso de los vecinos.

A primera hora de la mañana del martes, comprobaron que la puerta del inmueble había sido forzada y que su interior estaba okupado por un ciudadano italiano de 54 años, quien reconoció que había entrado de manera ilegal. Fue detenido y trasladado a la comisaría de la Policía Nacional bajo la acusación de presunto allanamiento de morada. Tras lo sucedido, el alcalde de Ibiza, Rafa Triguero, manifestó ayer su «rechazo frontal» a la okupación ilegal y agradeció la colaboración ciudadana, que permitió frustrar el intento de okupación en Dalt Vila.


Medidas

En esta misma línea, el primer edil exigió al Gobierno central «actuaciones urgentes» para evitar el «efecto llamada» a la okupación que se está produciendo en la isla en las últimas semanas.
Rafa Triguero hacía referencia a la okupación de una vivienda en el centro de Sant Antoni ocurrida la semana pasada. En relación al desalojo llevado a cabo por los agentes en la vivienda de la calle Narcís Puget Viñas, Julián Córdoba señaló que la detención pudo realizarse porque el infractor llevaba menos de 48 horas dentro del inmueble.

El director técnico de la Policía Local explicó que «cada caso es diferente», evitando de esta manera «dar explicaciones jurídicas» sobre la forma en la que deben proceder los agentes en esta situación.
Córdoba subrayó que «el allanamiento se comete en unas circunstancias muy concretas y la detención se puede hacer en unos momentos muy especiales, cuando los okupas son sorprendidos in fraganti».