Mientras conseguir una vivienda en Baleares se ha convertido en una carrera de obstáculos imposibles de superar, los partidos con representación en el Parlament se culpan unos a otros de esta grave crisis que afecta con especial intensidad a Ibiza y Formentera. El Govern de Marga Prohens defiende a capa y espada las medidas adoptadas desde el inicio de la legislatura, en el verano de 2023, para afrontar la situación. Enfrente, los partidos de la izquierda, que gobernaron las Islas entre 2015 y 2023, intentan tirar por tierra estas iniciativas que, de momento, no se han plasmado en realidades.
A lo largo de la sesión celebrada este martes en la Cámara autonómica, la vivienda ha surgido en varias preguntas formuladas por la oposición. El momento más tenso se ha vivido en el debate entre la única diputada de Podemos, Cristina Gómez, y el conseller del área José Luis Mateos. Gómez ha asegurado que el programa Lloguer Segur carece de unas bases como las que, en su opinión, deben regular cualquier convocatoria de ayudas del Govern. También ha criticado que se haya puesto en manos de lo privado, en referencia a los colegios oficiales de administradores de fincas y agentes de la propiedad inmobiliaria, la gestión de este programa. Y ha añadido que el Govern debería dar explicaciones de cómo piensa financiarlo si ahora mismo carece de presupuestos y está trabajando con los de 2024, que no contemplaban ninguna partida para este programa.
Mateo le ha respondido que puede consultar las bases que regulan Lloguer Segur en la web del programa o que, incluso, puede solicitarlas por escrito por vía parlamentaria. El conseller ha recordado que el programa está dentro del plan de choque del Govern para hacer frente al problema de la vivienda. Y le ha explicado que ahora mismo está en estado de «planificación o tramitación» la construcción de unas 5.000 viviendas para alquiler a precio asequible. Mateo ha señalado que Lloguer Segur persigue fundamentalmente lograr recuperar para el mercado del alquiler balear aquellas viviendas que están supuestamente vacías dando seguridad a los propietarios. Estas viviendas, de las que ya están en tramitación 400 en todo el archipiélago, tendrán un precio de alquiler un 30% por debajo del de mercado.
Minutos después ha sido la diputada socialista Mercedes Garrido la que ha arremetido contra el plan de choque para la vivienda. Garrido, que fue consellera del Ejecutivo de Francina Armengol, ha asegurado que, hasta ahora, este plan solo ha servido para sacar adelante la reconversión en viviendas de «cuatro locales» y ha insistido en que «no hay ningún contrato firmado de Lloguer Segur».
La socialista se ha llevado un buen repaso por parte del conseller de Vivienda, que no ha dudado en afirmar que si el problema es hoy en día tan grave en las islas es básicamente por la falta de acciones del Govern de la socialista Armengol. «Pretenden que en un año y medio solucionémosle la nada que ustedes hicieron en ocho años», ha dicho Mateo, «poco rigor, falta de políticas efectivas, mucha demagogia y nada de autocrítica».
La presidenta Prohens, por su parte, también ha sido preguntada por la intención del Govern de liberalizar suelo. La pregunta ha sido formulada por el diputado de Més per Mallorca Lluís Apesteguía, que ha asegurado que ahora mismo hay en Baleares 27 kilómetros cuadrados de suelo vacante en los que podrían construirse «103.900 viviendas».
Prohens ha defendido la liberalización de suelo tras recordar que el problema de la vivienda es una herencia de las dos anteriores legislaturas. La presidenta ha explicado que la población de las Islas ha crecido en 160.000 personas en los últimos 15 años. Sin embargo, en el mismo periodo de tiempo solo se han construido 36.000 viviendas. «Hace falta más vivienda», ha subrayado. Y ha explicado que es necesario «optimizar el suelo disponible para hacer nuevas viviendas para la gente de aquí e incidir en el mercado a través de más oferta».
Visiblemente molesta, Prohens ha puesto de manifiesto la hipocresía de la izquierda balear. Y lo ha hecho recordando que durante los gobiernos de Francina Armengol no se construyó vivienda para los residentes mientras que sí se autorizaron «3.000 chalés de lujo» y «se otorgaron más de 90.000 licencias de alquiler vacacional».
1 comentario
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
Todos iguales, unos como otros! """ahora mismo hay en Baleares 27 kilómetros cuadrados de suelo vacante en los que podrían construirse «103.900 viviendas»."" Esta es buena! venga! MÁS hormigón! después MÁS autopistas! bueno, y ya que estamos, MÁS hoteles también!