El Ayuntamiento de Sant Josep de sa Talaia, a través de la concejalía de Medio Ambiente, Sostenibilidad y Litoral, ha informado que entre los meses de diciembre de 2024 y enero de 2025 se ha llevado a cabo una limpieza intensiva en Sant Jordi con maquinaria de vapor de alta presión. Esta intervención ha tenido como objetivo la retirada de chicles y manchas profundas del pavimento, mejorando así el aspecto y la limpieza de las vías públicas.
Para este año 2025 el Ayuntamiento tiene el objetivo de incrementar el número de jornadas destinadas a la limpieza con esta tecnología, pasando de 110 a 160 días, lo que supone un aumento del 45 % respecto al año anterior. Este sistema de limpieza es especialmente eficaz para eliminar manchas difíciles, como los chicles incrustados y las pintadas, aunque requiere de más tiempo para conseguir unos resultados óptimos, según han explicado desde el Ayuntamiento.
Las tareas de limpieza se han realizado en dos zonas diferenciadas del passatge de Troia de Sant Jordi. La primera fase comenzó en diciembre, con la limpieza de la zona central, donde se encuentran las áreas más concurridas, y la segunda fase ha tenido lugar durante este mes de enero, cuando se han limpiado las zonas restantes del paseo. Todas las tareas se han llevado a cabo de lunes a sábado, en horario de 06.30 horas a 12.30 horas, para minimizar el impacto sobre el tránsito y la movilidad en la zona.
Más sostenible y eficiente
Tal y como han continuado explicando desde el Consistorio, el sistema de vapor de alta presión, que utiliza exclusivamente agua para limpiar, sin necesidad de productos químicos agresivos, representa una solución ecológica y respetuosa con el medio ambiente.
La limpieza con vapor de alta presión utiliza una maquinaria que escampa vapor a unos 160 grados de temperatura y con una presión ajustable de hasta 220 bars. Esta tecnología es capaz de producir unos 1.000 litros de vapor a partir de un solo litro de agua, lo que le otorga un rendimiento excelente. Además, permite una limpieza muy meticulosa, ya que la maquinaria puede actuar de manera precisa sobre las superficies del pavimento.
Una de las principales ventajas de este sistema es su eficiencia a nivel de sostenibilidad. En comparación con los métodos tradicionales, como la hidrolimpieza, que utilizan grandes cantidades de agua, la limpieza a vapor reduce sustancialmente el consumo de agua. Lo que se traduce en un impacto ambiental mucho menor, ya que poca cantidad de agua es suficiente para generar miles de litros de vapor. Este proceso no solo ofrece una solución más respetuosa con el medio ambiente, sino que también facilita la retirada de chicles incrustados y pintadas en el pavimento.
Esta tecnología representa una gran mejora en el mantenimiento de los espacios públicos ya que proporciona un acabado limpio y duradero con un impacto ambiental mínimo.
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