Esta empresa empezó siendo un diminuto almacén de apenas 80 metros cuadrados, donde un carpintero pintaba puertas. Un buen día, Antonio dijo en su casa que se quería quedar este almacén «y me dijeron de todo menos guapo», recuerda en una entrevista concedida a este rotativo en el año 2022. Y es que Torres Vich llevaba desde los 25 años vinculado al mundo de la construcción pero sus negocios no habían sido prósperos hasta el punto de deber alrededor de 300.000 euros de ahora.
«Había poco trabajo con las obras, cada día tenía menos dinero y el almacén que monté en casa salió a subasta porque no pude hacer frente a las deudas. No me daban crédito ni tampoco tenía dinero para pagar ni un saco de cemento», explicó a este rotativo.
«Era muy arriesgado, tuve que discutir mucho, pero yo necesitaba ese almacén para pagar mis deudas», recordó Torres Vich. Y acertó. «Poco a poco fui teniendo más trabajo en la construcción a la vez que hacía estribos para mí y para los pocos clientes que tenía. Apenas venían cuatro o cinco personas en todo el día», señaló. Poco tiempo después compró un camión que tenía 25 o 30 años y el negocio fue despegando hasta el punto de convertirse en una empresa que da trabajo a 25 trabajadores y que tiene una docena de camiones.
Antonio Torres Vich es una persona muy querida en la empresa que él mismo fundó. «Tus empleados de Ferretería Simón siempre te recordarán como el buen hombre, sencillo, trabajador, bondadoso, atento y mejor persona que siempre fuiste. Un placer haber coincidido contigo en este viaje. Gracias por todo. Vuela alto, jefe», se despiden sus trabajadores.
El funeral de cuerpo presente será este viernes a las 16.00 horas en la iglesia del Puig de Missa de Santa Eulària. El velatorio será en Pompas Fúnebres a partir de las 12.30 horas.
Descanse en paz.
1 comentario
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DEP. Solo he ido unas cuantas veces por la empresa, pero se ve un sitio honrado.