«Donde la fuerza no llega, deben entrar en juego otras habilidades»

Las mujeres asistentes han practicado técnicas como derribos, proyecciones, luxaciones en el gimnasio del colegio Vara de Rey. Antes de la parte práctica, venía la parte teórica. «Hay que diferenciar entre la autoprotección y la defensa personal femenina. Lo primero son medidas de seguridad para evitar situaciones de riegos, mientras que la defensa personal es cuando ya estás dentro de ese peligro, y no te queda más remedio que utilizar esa habilidad», ha explicado Cristina.

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En este sentido, ha indicado que lo esencial de la defensa personal «es evitar todo tipo de conflictos. Pero también saber estar preparada si estos son inevitables». Por ello, es tan importante adaptar las enseñanzas a las condiciones propias de las mujeres «por lo habitual estamos en inferioridad física frente a un hombre. Por ello, donde la fuerza no llega, tienen que aparecer otras habilidades», explica Cristina.

Estar preparado para hacer frente a una situación de estrés es muy importante. «Todo se basa en la repetición, en saber actuar cuando la mente se puede bloquear. Muchas alumnas, desgraciadamente, me han contado que han puesto en práctica lo aprendido con nuestros cursos». Para Cristina, la defensa personal es algo esencial: «hablamos de la mujer porque fue el 25N, pero la defensa personal tendría que ser una asignatura en el colegio», afirma.