Turistas por el portal de ses Taules el pasado mes de octubre. | Arguiñe Escandón

Las dudas sobre si sería una buena temporada turística o no se han disipado con los últimos datos de la encuesta de ocupación hotelera que elabora la patronal Fehif. En este sentido, el arrastre de temporada, es decir, de mayo a octubre que se considera en el sector turístico la temporada ‘oficial’ pone de manifiesto que Ibiza ha conseguido un 82,2% de ocupación frente al mismo periodo del año pasado, por lo que la mayor de las Pitiusas ha experimentado una caída del 0,49% respecto a 2023.

En el caso de Formentera, se ha conseguido un 73,7% de ocupación de las plazas hoteleras, lo que representa un aumento del 1,8% respecto al periodo comprendido entre mayo y octubre del año pasado. En conjunto, las Pitiusas consiguen un 81,6% de ocupación de plazas hoteleras frente al 81,7% del año pasado, es decir, prácticamente la misma cifra.

Por zonas

El análisis pormenorizado por zonas determina que prácticamente todos los municipios se han mantenido en cifras parecidas a las de 2023, con ligeras caídas en Sant Josep (-0,5%), Sant Antoni y bahía (-0,9%), la zona norte experimentó un descenso del 0,2% en la ocupación y Vila, por su parte, ha experimentado un ligero aumento del 0,7% en relación a la temporada turística de 2023. La nota algo más negativa recae en Santa Eulària, pues el municipio de la Villa del Río ha conseguido un 79,2% en el cómputo general de la temporada de este año, lo que representa una caída del 2,8%.

«La situación de Santa Eulària hay que tener en cuenta el descenso que ha tenido, que se vincula con el turismo familiar; esto es una aviso de que hay que estar pendiente de este tipo de turismo, aunque también desde el punto de vista de turismo familiar, otras zonas de Ibiza no han tenido ese descenso tan acusado», explica José Antonio Roselló, vicepresidente de la patronal CAEB Pitiusas, quien afirma que, en el cómputo general de la temporada, la apreciación más acertada que se puede hacer es que «se ha igualado a la temporada a la anterior dado que unas bajadas tan pequeñas quiere decir que estadísticamente se han conseguido los mismos números. Ha sido una buena temporada; se puede decir que hemos mantenido el tipo y se ha demostrado que Ibiza y Formentera siguen teniendo una solvencia turística importante».

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Roselló precisa que la presente temporada turística que se da oficialmente por acabada ha estado marcada por los altibajos y «se ha ido conformando a medida que pasaban las semanas, aparte de algún susto que habido entre medio», expresó en relación a la acusada caída de ocupación hotelera que experimentaron las Pitiusas el pasado mes de julio, que el sector turístico achacó a los eventos deportivos internacionales que había en marcha.

Si bien se puede considerar que la temporada turística en términos generales ha sido buena en Ibiza y Formentera, el vicepresidente de CAEB en las Pitiusas quiso recalcar que «no es lo mismo la situación hotelera en general que el conjunto de la economía, pues ha habido otras actividades económicas que han registrado más oscilaciones».

Octubre

La última encuesta de ocupación hotelera refleja que el mes de octubre ha sido especialmente bueno para la planta hotelera que quedaba abierta, pues en Ibiza se consiguió un 70,3% de ocupación, lo que representó una mejoría del 2,5%, mientras que Formentera alcanzó un 62,2%, lo que supuso un aumento del 7% en comparación con el mismo mes del año pasado. «Octubre es una prueba de que la situación turística ha sido moderadamente positiva; hay que tener en cuenta que hay planta cerrada en octubre, pero en general fue un buen mes y eso se pudo notar y ver en el ambiente», precisó Roselló.

Por zonas, la que mejor funcionó en octubre fue Vila, que consiguió un 69% de ocupación, lo que representa una mejora del 7,7% respecto al mismo mes del año pasado. La zona norte experimentó una mejoría del 3,3% en comparación con octubre del año pasado, alcanzando un 73,8%. En Santa Eulària, la planta abierta en octubre consiguió un 71,9% de ocupación, lo que repesentó una mejora del 2,6% respecto al último año, mientras que Sant Josep consiguió un 69,9% de ocupación, prácticamente igual que el año pasado. El único municipio en negativo en octubre fue Sant Antoni, con un 70% de ocupación, un 3,2% menos que hace un año.