Dos turistas saliendo de un hotel en Ibiza. | Archivo

Fernando Boro, inspector de Trabajo, ha remitido a este periódico una nota en la que solicita la rectificación de la información titulada «Inspectores del Govern exigían apartamentos en Ibiza para estar con sus parejas» que fue publicada en este medio el 27 de noviembre.

«La afirmación llegaron a exigir es totalmente incierta. En primer término, se aporta un correo electrónico de un funcionario en singular. Por lo tanto, ¿Cabe colegir que de un comportamiento individual se extraiga una conclusión de una exigencia colectiva? Evidentemente, no. Además de esto en la información publicada el empleado público no exige, simplemente pregunta».

«Basar una noticia y un titular tendencioso y manipulado en un correo electrónico en el exige, solo se pide información, es una praxis periodística ajena a unos mínimos estándares aceptables de ética periodística. En esta línea usted afirma «disponer de un apartamento con cocina era una de las distintas peticiones que realizaban los inspectores antes de incorporarse a sus puestos de trabajo en comunicación permanente con los funcionarios del Govern, ¿quien lo ha hecho? ¿Quien lo ha pedido? Se vuelve a reiterar lo mismo: se está acusando falsamente a un colectivo de funcionarios en su totalidad por unos supuestos e iveraces hechos basados en un correo electrónico de una persona cuya información ha sido tergiversada».

La nota enviada por Fernando Boro, en su derecho a rectificación, añade: «En el subtítulo usted afirmó que ‘Los trabajadores de la campaña contra el fraude no aceptaban el alojamiento que les daba el Govern’. Extremo totalmente falso y falto de rigor. Como en lo anterior, hace usted mención a que no aceptábamos el alojamiento cuando la realidad es la contraria: nos alojamos en los establecimientos hoteleros que nos fueron asignados por el Govern en la comisión de servicios».