Una inspectora de refuerzo amenazó con no trabajar más si no le cambiaban de hotel

El informe de incidencias se refiere a la campaña de 2023 y se explica que dicha inspectora, que en este caso tenía la categoría de subinspectora, solicitó si en el hotel donde se alojaría «podía alojar mascotas ya que -esgrimía- durante el tiempo que dura la campaña una persona iba a alojarse con ella y quería saber si podía traerla». «Una vez realizada la gestión con la agencia de viajes se le informó que no era posible», señala el funcionario.

«Una semana antes del inicio de la campaña llamó para informarse si podía tener alguna penalización/coste no realizar la campaña», explica dicho informe.

«El primer día de la campaña llamó para quejarse por no tener incluido en el seguro del coche la cobertura de cristales, ruedas y bajos del coche. Se realizó la gestión con la agencia de viajes y se le trasladó que el coche tiene cobertura a todo riesgo sin franquicia», añade el informe al que ha tenido acceso Periódico de Ibiza y Formentera.

Quejas el primer día

El informe destaca que «el primer día de la estancia en Ibiza, la trabajadora llama para manifestar el descontento con la habitación asignada. Se le informa que el hotel cumple con las condiciones del contrato al ser un hotel de 4 estrellas y que no podíamos realizar ninguna gestión al respecto. Asimismo se le informa que el hotel, de manera gratuita, le incluye el desayuno».

Noticias relacionadas

Inspectores del Govern exigían apartamentos en Ibiza para estar con sus parejas

Días después volvieron las quejas de dicha trabajadora. En un mail enviado a un funcionario la subinspectora de refuerzo relata: «Siento molestarte tanto, pero es que lo estoy pasando fatal con el tema del hotel. Las habitaciones que nos han dado son roñosas y ahora se ha estropeado el aire acondicionado y no me dan una solución. Me dicen que no hay habitaciones disponibles. Yo de verdad estoy por irme a mi casa. No sé si tú me puedes reubicar o buscar alguna solución pero esto es infrahumano», lamenta. La agencia de viajes que interviene en el alojamiento de dicha inspectora también aporta información al respecto y un trabajador expone al Govern: «He hablado con el director del hotel. Se ve que desde el primer día ya puso pegas (la inspectora) porque no estaba abierto el gimnasio según el horario, que el aire no funciona. Según me comenta el director el aire funciona y el gimnasio se abre a petición del cliente ya que nadie lo utiliza».

Dicha trabajadora compartía hotel con otra inspectora, quien no se quejó de ninguno de los problemas denunciados por la primera, quien llegó a afirmar que un empleado del establecimiento turístico quiso agredirla en el aparcamiento, algo que las cámaras de seguridad desmintieron posteriormente.

Pero el tono de protestas siguió aumentando durante los días posteriores y en uno de los correos remitidos a la antigua Conselleria de Treball la inspectora escribió: «¿No me vais a solucionar nada hoy tampoco? Necesito una solución, me está costando la salud esta situación. Te he llamado 7 veces a lo largo del dia y no sé nada de que va a pasar conmigo. No estamos hablando del aire acondicionando, estamos hablando de actitudes violentas del personal del hotel, estar un día sin luz a oscuras». En dicho correo amenaza con plantarse, con no trabajar más por sus problemas con el alojamiento en el hotel de cuatro estrellas situado en el centro de Vila. «Yo de momento no voy a entregar ningún expediente más.

Si no me solucionan esto pues me tendré que marchar por mi cuenta, pero trabajo no entregaré nada más y las faltas de alta que pillé que se queden impunes», avisó dicha trabajadora de refuerzo en la inspección de empresas turísticas.

Ante esta última comunicación el Departamento de Relaciones Laborales remitió a la Oficina de la Inspección de Trabajo un resumen de incidencia «puesto que la trabajadora indica que no va a trabajar más para que tomen las medidas que consideren oportunas».