Una veintena de alumnos de primero de bachillerato del IES Sant Agustí visitaron el pasado fin de semana el CERN (Centro Europeo de Investigación Nuclear) cerca de la ciudad suiza de Ginebra.
Allí, han podido disfrutar de una visita al que es el mayor centro de investigación de Europa, donde se alberga el acelerador de partículas más grande del mundo y donde se llevan a cabo todo tipo de investigaciones relacionadas con el modelo estándar de partículas, la antimateria, la materia oscura o el bosón de Higgs, entre otros experimentos.


Tal como explica la profesora de física, Mari Carmen Moral, una de las docentes del centro que acompañó al alumnado en este viaje, «estuvimos preparándonos antes para poder entender mejor todo lo que nos explicaron allí». Tal como explicaba Moral, «han podido ver que las investigaciones del CERN se pueden aplicar a muchas disciplinas como, por ejemplo, la medicina. De hecho, internet, surgió de allí, que es donde nació la www.».


La visita, tal como recuerda la profesora, «fue posible gracias a la Amipa y al Ajuntament de Sant Josep, que nos pagaron el bono turístico y el minibús respectivamente. Sin su ayuda no podríamos haber podido hacer la visita, tal como nos ha sucedido otros años, hay que tener en cuenta que Ginebra es una ciudad muy cara».


Respecto al resultado de la visita, la profesora se muestra más que satisfecha, «el alumnado ha hecho muchas preguntas y ha estado muy interesado, además, hemos tenido la oportunidad de acercarles a lo que viene a ser la física moderna, más allá de la física clásica que se enseña siempre en las aulas. Mostrarles para qué sirve lo que están aprendiendo y cómo se puede utilizar si, finalmente, deciden dedicarse a la ciencia».


Vocación
Uno de los alumnos de Sant Agustí que, tras la visita al CERN, se está planteando su futuro es Toni: «Estoy muy agradecido por esta visita. Ha sido una oportunidad increíble poder ver cómo funciona el universo de la mano de los mejores expertos del mundo. Me ha despertado mucho la curiosidad y me ha reavivado de nuevo la llama de querer estudiar Física».


Sílvia también es una de las alumnas a quien la visita a Ginebra le ha abierto nuevos horizontes de cara a su futuro, «he descubierto una parte de la física que no conocía. Me ha parecido muy interesante y me estoy planteando la posibilidad de estudiar algo de ese tipo. Incluso de ir al mismo CERN a estudiar en verano», explica la alumna. En este sentido, la profesora no deja de poner en valor la figura de Johnny, el científico que hizo de guía a la expedición de Sant Agustí, «un doctor en física que dirige uno de los experimentos que se hacen allí. Nos habló de la escuela de verano que tienen en el centro de la que habla Sílvia».


A Mar, le sorprendió «lo grandes que son las instalaciones y que hay gente de todo el mundo trabajando allí y son todos científicos de distintas ramas». Ángel tiene claro que quiere estudiar ingeniería informática y, tras este viaje reconoce que «hay posibilidades» de que enfoque su carrera a la investigación en el CERN.


Turismo
Aparte de la ciencia, el viaje también ha permitido al alumnado de Sant Agustí conocer algunos puntos turísticos de la ciudad de Ginebra como la catedral de San Pedro, el Jet d'eau (un chorro de agua 140 metros de altura) o el Museo de Historia de la Ciencia. Sin embargo, el alumnado también se mostró sorprendido con la ciudad suiza, «la gente es muy deportista, está muy limpio, se ve muy seguro y es increíble lo bien que van los autobuses», tal como explicaba Ismael, mientras su compañero apuntaba que «además, ¡está lleno de cochazos!». Una ciudad, Ginebra, que en este viaje ha ampliado el horizonte de alumnos como Toni y Sara en cuanto a sus estudios, pero que a Arturo, además, le ha hecho plantearse «irme a vivir allí. Trabajando de lo que sea, en el CERN o en un Kebab, me da igual».