Imagen de la última patera que llegó el 6 a Formentera. Abajo, enseres de los migrantes en las rocas.

El director insular de la Administración del Estado en las Pitiusas, Enrique Sánchez Navarrete, puntualizó este sábado que la mujer embarazada que llegó en patera a la isla de Formentera está considerada como «colectivo vulnerable», por lo que ha sido atendida según el programa puesto en marcha por el Ministerio de Migraciones y su asistencia corre a cargo de Cruz Roja. Lo mismo sucede con los seis menores que viajaban en esta embarcación, entre ellos, un bebé de tan solo cinco meses.

Desde la ONG explicaron este sábado a Periódico de Ibiza y Formentera que, una vez llegaron a Ibiza, se realizó una primera valoración sobre el estado de estos migrantes y se les facilitó comida, productos de higiene o ropa de abrigo. El bebé recibió también un ‘kit para lactantes' que incluye leche de continuación, pañales y otros artículos para su cuidado.

A pesar de la travesía, la situación de todos era buena. Cruz Roja destacó que, en esta ocasión, los menores viajaban acompañados, por lo que no será necesario que el Consell d´Eivissa se encargue de su tutela. La mujer embarazada y los niños, junto a sus familiares, serán trasladados en breve a un centro de acogida de Mallorca o de algún otro punto del país. El objetivo es no separar a las familias que llegan juntas.

En relación a esta última patera interceptada en las Pitiusas, el director insular de la Administración del Estado recordó que se han seguido los protocolos establecidos. Sobre las características tan particulares de algunos de los migrantes, Sánchez manifestó a título personal que deben existir «circunstancias que les expulsan de su país y esta mujer embarazada debe sufrir una situación tan desesperada que le empuja a jugarse su vida y la de sus hijos».

En relación al resto de migrantes interceptados el viernes, explicó que, siguiendo los procedimientos habituales, se trabaja en sus procesos de devolución y puesta en libertad al estar cerradas las fronteras de Argelia.

Cifras similares

El director insular consideró «poco responsable» realizar valoraciones sobre la oleada de pateras que han alcanzado las costas de Baleares en estas fiestas de Navidad y confirmó que, aunque las cifras de llegadas de migrantes son «altas», en las islas se registran datos similares a los del pasado año, un hecho que calificó como una «buena noticia» al no producirse los aumentos exponenciales que sí hubo en años como 2018 o 2019.

«El planteamiento de por qué vienen estas personas está determinado por las circunstancias políticas, económicas o sociales de sus países de origen», insistió.

El responsable del Estado en las Pitiusas apostó por buscar una solución «global» al fenómeno de la migración irregular puesto que es un «problema mucho más complejo y requiere de soluciones interconectadas con otros países de Europa».

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Al mismo tiempo, resaltó las políticas impulsadas desde el Gobierno para intentar frenar la llegada descontrolada de migrantes, fomentando en los países de origen ayudas al desarrollo y aprobando en España modificaciones legales destinadas a facilitar la incorporación de los más jóvenes al mercado laboral. También puso en valor la aprobación de leyes para combatir la trata de personas y, en este sentido, destacó la labor y el «esfuerzo brutal» de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado a la hora de identificar y detener a los patrones de las pateras.

«En Baleares, y en Ibiza también, están siendo detenidos muchos de estos patrones porque forman parte de estas mafias y están terminando en prisión. Se está haciendo un esfuerzo muy significativo por parte del Gobierno y de las fuerzas policiales en relación a diferentes vías», explicó Sánchez.

Además de esta labor policial, el director insular recordó la cobertura que se brinda a las personas llegadas más vulnerables y explicó que, en el caso de que los países de origen lo permitan, se producen las devoluciones de los migrantes. Según afirmó, el 70% de los migrantes llegados a Ibiza en 2019 fueron devueltos a sus lugares de origen, principalmente Argelia.

Patera

Este pasado viernes, la Policía Local de Formentera y patrullas de seguridad ciudadana de la Guardia Civil interceptaron a 21 inmigrantes llegados a la costa pitiusa. Según informó la Delegación del Gobierno en Baleares, se trataba de 21 personas de origen magrebí, en aparente buen estado de salud, localizadas a las 09.45 horas en la playa de Es Caló. Entre los migrantes había seis menores, uno de ellos, un bebé de cinco meses. También viajaban tres mujeres, una de las cuales está embarazada, por lo que fue trasladada al hospital para su observación.

Los vecinos de la zona de Es Caló colaboraron en la recuperación de la embarcación donde viajaban estas personas ya que, según relataron testigos presenciales, quedó a la deriva, lo que hace presuponer que los migrantes saltaron al mar antes de llegar a la costa.

Durante el 6 de enero, llegaron a Baleares 61 personas en patera, de las cuales 40 fueron interceptadas en dos naves en Mallorca y otras 21 en Formentera. Cabe destacar que se trata de la primera patera del año en las Pitiusas y la cuarta de Baleares.

Fenómeno

Desde la Delegación del Gobierno informaron recientemente de que el origen de los pasajeros que viajan a bordo de las embarcaciones tipo patera es variado y son principalmente argelinos, aunque también los hay de países centroafricanos o Marruecos. Después de los pagos correspondientes a las organizaciones o grupos criminales, se aprovechan los días con la mar más calmada para iniciar el viaje a las costas de Baleares.

Durante la travesía, los pasajeros corren serios riesgos para sus vidas: les son asignados lugares en la embarcación para que ésta se mueva lo menos posible; carecen de chalecos salvavidas suficientes, de alimentos y agua, y almacenan gasolina para repostar, incluso con la patera en marcha.