El alcalde de Sant Antoni, Marcos Serra, y la concejala Neus Mateu, ayer, en rueda de prensa.

El Ayuntamiento de Sant Antoni se ha tomado en serio la lucha contra el llamado turismo de excesos que, en este municipio, se localiza en la zona del West End. Con la base del decreto del Govern de 2020 conocido como decreto de excesos, el Consistorio gobernado por el popular Marcos Serra ha reforzado las áreas de Seguridad, Urbanismo y Promoción Turística con el objetivo de reconvertir la Villa de Portmany para que deje de ser un polo de atracción para este tipo de turismo. Para ello, Serra dejó claro este viernes que es necesario que el Ejecutivo de la socialista Francina Armengol colabore con el Ayuntamiento y envíe a los inspectores que, recordó, se comprometió a aportar el conseller autonómico de Turismo, Iago Negueruela.

«No hemos conseguido la implicación del Govern», ha denunciado este viernes Serra, que también recordó que esta falta de personal no se ha producido en otras áreas afectadas por el turismo de excesos en Mallorca, como son los casos de Palma y Calvià. Por ello, el alcalde exigió a Armengol y Negueruela que aporten los medios necesarios para que Sant Antoni pueda aplicar con éxito el decreto de excesos. Algo que, recordó, sí ha hecho el Consell d'Eivissa, gobernado por el también popular Vicent Marí. La institución insular, explicó Marcos Serra, sí ha puesto al servicio del Consistorio los inspectores del departamento de Turismo. Pero «quien hace la ley tiene que ayudar a aplicarla», subrayó en referencia al Govern balear.

El primer edil lanzó también un duro mensaje contra los concejales de la oposición en el Ayuntamiento, a los que acusó de difundir «noticias falsas» sobre las actuaciones municipales para acabar con el turismo de excesos. Así, puso como ejemplo de estas supuestas falsedades la difusión de un supuesto suceso de balconing que, en realidad, se trató de un accidente que «está siendo investigado por la Guardia Civil». «Son mentiras de la oposición», lamentó, «pero la mentira, por muchas veces que la repitas, no se convierte en realidad».

Serra explicó que en el área de Seguridad, el Gobierno municipal ha hecho un gran esfuerzo en la presente legislatura, logrando tener la plantilla de la Policía Local prácticamente completa. El alcalde aprovechó para lanzar un dardo contra el Ayuntamiento de Ibiza, gobernado por el socialista Rafa Ruiz, al recordar que los agentes de la Villa de Portmany hacen horas extras «y las cobran». En Vila, han tenido que recurrir a la Justicia para conseguir recibir este complemento económico.

Además de completar la plantilla, la Policía Local de Sant Antoni cuenta ahora mismo con dos unidades caninas y una de playas destinada específicamente a los carteristas y la venta ambulante. A esto se suma que la aplicación del decreto de excesos se lleva a cabo en todo el casco urbano del municipio y no solo en la zona del West End.

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Todos estos agentes han levantado desde que comenzó la temporada alta el pasado 15 de mayo y hasta el mes de julio un total de 86 denuncias por ruido (14), publicidad dinámica (12), salud pública (23) y tenencia y consumo de sustancias estupefacientes (37), según detalló la concejal del área, Neus Mateu.

La Policía Local, por otro lado, ha incrementado su cooperación con la Guardia Civil, cuerpo con el que, avanzó Marcos Serra, firmará un convenio de apoyo con el fin de mejorar la vigilancia en el municipio. Ante las críticas de la oposición, el alcalde señaló que los socialistas, aprovechando que gobiernan en el Estado, «podrían pedir que se envíe a más guardias civiles para acabar con el turismo de excesos».

Serra destacó también el esfuerzo que está haciendo el Consistorio en lo relativo a la limpieza del municipio. En este sentido, el primer edil explicó que se ha incrementado en 500.000 euros anuales la partida para la contrata de la limpieza. Una decisión que no contó con el respaldo de la oposición, lamentó Serra, a pesar de que supondrá contar con «seis nuevos operarios y más maquinaria para solventar el problema». El alcalde recordó que el contrato fue firmado la pasada legislatura por el Gobierno del socialista Pep Tur Cires y que se trata de una adjudicación que «es insuficiente» para las necesidades del municipio.

Turismo

En lo que al área de Turismo se refiere, finalmente, el alcalde afirmó estar «orgulloso» de la promoción que se está llevando a cabo del municipio en esta legislatura. Así, Marcos Serra destacó que el Consistorio está promocionando los segmentos de turismo gastronómico, de bodas y cultural aprovechando los recursos existentes en el municipio, además de ejecutando campañas destinadas a la desestacionalización. A diferencia de lo que sucedía en la anterior legislatura, ahora «hay una nueva web y se han reactivado las redes sociales, que se actualizan a diario». Todo con el objetivo de «atraer a un turismo diferente», subrayó el alcalde.

La cultura debe servir también para reconvertir el modelo turístico de la Villa de Portmany. Por ello, el Ayuntamiento prepara una ruta del arte que debería atraer a «un turismo de más calidad». Además, se está organizando también una actuación del artista internacional Okuda San Miguel, a pesar de que «la oposición intentó bloquear» esta iniciativa «pidiendo más estudios».

El apunte
Gisela Revelles

16 locales expedientados en lo que va de año y sanciones de hasta seis meses

Gisela Revelles

Si algo ha cambiado en Sant Antoni esta legislatura ha sido, según han señalado este viernes Marcos Serra y Neus Mateu, lo relativo al control y la seguridad. Así, la concejala del área y teniente de alcalde recordó que se ha expedientado este año a 16 establecimientos y que las sanciones, al contrario de lo que sucedía en la anterior legislatura, contemplan cierres que van desde un mes hasta los seis meses. «Se está haciendo un gran esfuerzo en inversión en seguridad para el pueblo y contra el turismo de excesos», dejó claro la concejala.

Mateu, al igual que el alcalde, también subrayó la importancia de que el Govern aporte el personal necesario para poder obtener resultados en la aplicación del decreto de excesos, como ya está sucediendo en Palma y Calvià. La concejala mostró su confianza en que Iago Negueruela cumpla su compromiso que, según relató, reafirmó en la última reunión de la comisión de seguimiento del decreto, celebrada recientemente.