Santa Eulària celebró ayer su día grande con una imagen muy distinta a la de otros años. El Puig de Missa apenas tuvo gente, con escasa representación institucional separada por la consiguiente distancia de seguridad y encabezada por la alcaldesa, Carmen Ferrer, y sin vecinos en el exterior. Incluso, el Grup de Ball Pagès Es Broll, no pudo contar con todos sus miembros, siendo representados por tres de ellos que no dudaron en dedicar una ‘curta' a todos los que no pudieron acudir.
2 comentarios
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A ver, si la celebración es Santa Eulalia, repito Santa, lo normal y lo que entendería el más tonto del mundo , es que se celebrara en una Iglesia, y más en tiempos de confinamientos, reuniones y prohibiciones, pero NOOO, aparecen los llamados " ateos ", que lo normal es que si tanto asco tienen a la Iglesia, sería que no hablaran, comentaran o escribieran de ella, pero gracias también a ellos, la hacen más grande día a día, venga y hoy a celebrar San Valentín,,
... no entiendo lo de la REPRESENTACIÓN INSTITUCIONAL, si resulta que el día grande se circunscribe únicamente a la dichosa misa de MARRAS, lo suyo es que no hubiesen acudido, porque aunque el clero quiera apropiarse de la celebración de una fiesta que debe de ser del municipio primero, como estamos en una sociedad aconfesional, lo suyo hubiese sido dejar solos al clero y a los fieles que aún queden