Vicent Marí, con mascarilla, durante el último Consell del Alcaldes. | Daniel Espinosa

«Estoy muy indignado porque soy un municipalista convencido». Así resumió su sentir Vicent Marí. El presidente del Consell d'Eivissa se mostró muy en desacuerdo con la fórmula aprobada por la FEMP y publicada en el BOE por la que el Gobierno tomaría prestados los ahorros de los ayuntamientos y se los iría devolviendo en los próximos 15 años. Marí calificó esta propuesta como «un chantaje» o «una incautación de los ahorros de los ciudadanos».

El popular aseguró que en la situación actual los Ayuntamiento no pueden esperar 15 años y que es ahora cuando se necesita el dinero para poner en marcha planes de reactivación. Marí considera «absurdo» tener que entregar todo el dinero al Estado para que este devuelva de manera inmediata un 35% para financiar actuaciones en las áreas de agenda urbana y movilidad sostenible, cuidados de proximidad y cultura.

Marí fue muy duro con la FEMP y especialmente con su presidente Abel Caballero. «La FEMP no ha estado a la altura. Ha sido un acuerdo en precario que se ha decidido por el voto de calidad del presidente. Se ha roto el consenso histórico que siempre impera y se ha deslegitimizado a este ente. Era la decisión más importante de su historia y han decidido entregar el dinero siguiendo unos intereses partidistas». «La FEMP se ha convertido en un brazo ejecutor del PSOE y la frustración que sentimos es muy grande», añadió, antes de reclamar la dimisión de Abel Caballero: «Ha quedado retratado, no ha defendido los intereses municipalistas, no ha estado a la altura del puesto que ocupa y quizás debería dimitir». «Caballero debería dimitir. Debería abandonar la FEMP porque no ha estado a la altura», insistió.

En la línea del partido
Vicent Marí no quiso entrar a valorar qué harán con los 82 millones que tienen de remanente ya que considera que aún hay tiempo para que esta propuesta se pueda cambiar en los próximos días. «Se peleará y confío que este decreto no se refrende en el Congreso. Espero que se llegue a un consenso entre las diferentes fuerzas políticas porque esto es intolerable», confesó, antes de volver recordar que es algo «inaudito» que la FEMP no haya llegado a un acuerdo de consenso.

En cuanto al comunicado del PP balear que señalaba su rechazo a «que Sánchez y Armengol roben los recursos que con mucho de sacrificio se han acumulado durante años en nuestros municipios» y que anunciaba que «los alcaldes del PP apuestan por abandonar la FEMP y no entregar los remanentes, postura que trasladaremos a la dirección nacional del partido». Marí se mostró favorable: «Todo lo que se haga para ir en contra de este abuso es necesario. Nuestra idea es no ceder al chantaje. Es muy duro estar chantajeado y tener que pasar por el aro porque no hay otro remedio».

En esa misma línea, volvió a insistir en el libre uso de estos fondos: «No se puede tolerar que debamos entregar un dinero propio que es de nuestros ciudadanos. Estamos reclamando el uso de nuestros ahorros. Es absurdo que reclamemos esto».

Además, definió la situación como «el mundo al revés». «El Ayuntamiento prestando dinero al Estado. Es inaudito. No tiene sentido», señaló visiblemente molesto.

Por último, criticó al Gobierno de Sánchez ya que considera que están «desaprovechando la oportunidad de llevar a cabo una reactivación económica a través de acciones locales». «Las administraciones locales son las que, por cercanía, mejor conocen las necesidades de sus ciudadanos», concluyó.