‘Un Mar de Posibilidades' ha acercado a los residentes de Cas Serres los beneficios del agua en su 17ª edición

Según ha señalado un comunicado emitido por el Club Náutico Ibiza, el departamento ocupacional de este hospital residencia asistida ha remitido una carta a la dirección de este programa social en la que agradece el esfuerzo de la dirección de este proyecto a la hora de adoptar las medidas de seguridad e higiene impuestas por la normativa vigente.

Se trata de la segunda vez en esta temporada que este centro participa en ‘Un Mar de Posibilidades' tras considerar que se trata de una iniciativa con amplios beneficios terapéuticos y “en la que sus participantes han disfrutado muchísimo”, según apuntan desde Cas Serres. “A pesar de la incertidumbre y del peso de la responsabilidad que supone salir con nuestros mayores (colectivo de riesgo) a realizar una actividad fuera del recinto, tenemos que decir que es una gozada, y que verdaderamente merece la pena”, han matizado en la misiva en la que destacan que “aunque algún rezagado al principio no quiso mojarse ni la punta del pie, al final disfrutaron muchísimo de todo lo que se les propuso en la playa”.

Cumpliendo con la normativa

La dirección y voluntarios de ‘Un Mar de Posibilidades' esperaron a los residentes de Cas Serres a su llegada a la zona de Talamanca donde el Club Náutico Ibiza cuenta con las instalaciones habilitadas para este proyecto social para ayudarles a bajar y ofrecerles gel hidroalcohólico. Además adaptaron las actividades deportivas para respetar la distancia de seguridad entre sus participantes y desinfectaron cada silla adaptada y todo el material, pelotas, aros, chalecos o salvavidas para cumplir con la normativa vigente. “Estamos siguiendo unos protocolos muy estrictos para velar por la seguridad de nuestros participantes y de nuestros voluntarios”, ha matizado Pedro Cárceles, director de ‘Un Mar de Posibilidades', quien ha concretado que, además, se ha limitado el aforo del vestuario y todo el personal está trabajando con mascarillas aunque las actividades acuáticas no lo exijan “para dar mayor tranquilidad a nuestros usuarios”. Cárceles ha agradecido cartas como la enviada por Cas Serres esta semana “en la que ponen de manifiesto que se nota que amamos lo que hacemos y que le ponemos mucho empeño para que salga bien, porque esa es precisamente nuestra razón de ser”.

Este programa, que nació en 2004 y que ha sido reconocido en ámbito nacional, arrancó el pasado 22 de junio con la mitad de usuarios de años anteriores, 180, precisamente para velar por su seguridad en el marco de esta “nueva normalidad”, para que todos ellos “puedan disfrutar de los beneficios del mar como cualquier otra persona”, ha afirmado su director.

Así, para esta nueva edición se han establecido diversos protocolos sanitarios destinados a preservar la seguridad, tales como la creación de grupos reducidos de usuarios que provengan siempre de una misma asociación y que, según ha afirmado Cárceles, “ya hayan convivido previamente durante el confinamiento”. En este sentido, también se han visto reducidas las actividades que tendrán lugar únicamente por la mañana, de lunes a sábado, hasta el mes de septiembre.

En esta línea las instalaciones de ‘Un Mar de Posibilidades' cuentan con un tratamiento especial y con una desinfección diaria, cada tarde, con el fin de adoptar todas las medidas higiénicas necesarias. Asimismo se han instalado lavamanos en los dos vestuarios, mamparas en las duchas, así como taquillas para que cada usuario disponga de un espacio individualizado en el que dejar sus enseres.

Un año más este proyecto social cuenta con el apoyo del Consell d'Eivissa, del Govern de les Illes Balears y de los cinco Ayuntamientos de la isla, así como de la Obra Social “La Caixa”, la Fundación Abel Matutes y Valoriza M.A.