En la comparecencia, Illa pidió «disciplina social» para esta etapa de «transición a la nueva normalidad». El Ministro aseguró que había dos pilares básicos: «la cogobernanza, se han acordado unos indicadores con las comunidades y la cautela que tiene tres principios: prudencia, prudencia, prudencia».
Illa explicó que se habían analizado todas las propuestas enviadas por las CCAA. El Govern Balear hizo llegar su propuesta el pasado jueves que posteriormente analizó el Ministerio de Sanidad. En total fueron 19 reuniones bilaterales con las comunidades, más Ceuta y Melilla.
El Ministro señaló que habían sido unas «decisiones complejas» que tienen el objetivo de «consolidar lo logrado, que es controlar la epidemia». Illa informó de que el 51 % de la población española accedía a la fase 1 y que hoy se publicará una orden ministerial en la que se relatará todo lo que está permitido en esta fase.
Por su parte, Fernando Simón se encargó de explicar los criterios utilizados para decidir qué comunidad autónoma entraba en fase 1 y cuál no. A modo de resumen, señaló que el principal era el de número de camas en los hospitales por cada 10.000 habitantes, tanto para críticos, como para enfermos leves. Además, se valoraron otros criterios relacionados con la transmisión de la enfermedad; el número total de casos confirmados por PCR por fecha de inicio de síntomas y notificación, la incidencia acumulada en los últimos siete días, los casos sospechosos que, tras hacerles una prueba, dan positivo.
Otros criterios llevarían a tomar medidas drásticas son el número de pacientes hospitalizados en los últimos siete días y % de ocupación en hospitales, lo mismo que en UCI o el número de fallecidos. La capacidad del sistema para detectar de forma precoz un rebrote y responder que es una tarea de Atención Primaria que debe ser reforzada; y otra serie de medidas que se analizaron.
Después pasó a dar la lista de las provincias que entraban en fase 1 y las que no. Cuando llegó a Baleares señaló que accedía «Después de valorar una muy buena evolución de la epidemia y una capacidad asistencial, de recursos y de sistemas de información muy buena».
Responsabilidad
Por su parte, el presidente del Consell d'Eivissa Vicent Marí se mostró encantado por seguir avanzando. «Es un pequeño gran paso», resumió. El presidente ibicenco aseguró: «El lunes empieza la cuenta atrás para recuperar la normalidad».
Aunque si hay algo en lo que insistió Marí fue en un llamamiento a la responsabilidad de la población. «Confío en que los ibicencos estaremos a la altura, igual que lo estuvimos durante el confinamiento. Es muy importante no relajarse porque la enfermedad sigue ahí. Es más importante que nunca extremar las precauciones y cumplir estrictamente las medidas sanitarias», señaló.
En esa misma línea, aseguró que si había algo que no se podía permitir Ibiza era un rebrote. «Tenemos que ser responsables e ir cumpliendo los plazos de la desescalada. Debemos recuperar nuestra economía poco a poco. Si cumplimos las fases podremos tener un poco de temporada. Será anómala y compleja, pero debe ser un trampolín para 2021, cuando espero que ya recuperemos la normalidad total».
Marí reclamó una vez más que se hagan controles en los aeropuertos y puertos. «Debemos ofrecer a España y al mundo una imagen de isla segura. Que vean que hacemos bien las cosas y que aquí pueden venir a disfrutar de sus vacaciones sin problemas».
En relación a esto, lamentó los 12 fallecidos que se contabilizaron en la isla, pero recordó que la «incidencia del virus había sido baja». Aún así, volvió a pedir prudencia: «Es importante seguir avanzando por este túnel largo y oscuro, pero, ojo, seguimos en estado de alarma y aquí no se trata de correr, se trata de hacerlo bien».
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