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Las Pitiusas tienen por primera vez desde que empezó la crisis sociosanitaria provocada por la COVID-19 más pacientes curados que enfermos de coronavirus. Según los datos facilitados ayer por el Área de Salud de Ibiza y Formentera, una nueva alta en la jornada del domingo eleva el número de curados a los 71, mientras que el de casos activos se sitúa en las 70 personas. Al no registrarse nuevos contagios, el total acumulado se mantiene en 152, con 11 fallecidos.

El alta corresponde a uno de los dos profesionales sanitarios que continuaban enfermos y estaban en seguimiento por la UVAC. Se trata de uno de los aspectos que más han querido destacar desde el Área de Salud, ya que son 12 los días en los que no se contagia ningún sanitario. En relación a esto, 23 profesionales sanitarios se mantienen en vigilancia a la espera de ver la evolución.

En cuanto a los casos activos, 41 de ellos se encuentran hospitalizados, con 11 en estado grave. Según las cifras oficiales, Can Misses albergaba a 31 enfermos, los mismos que el día anterior. 10 se encuentran en planta, 11 en Ca Na Majora, siete en la UCI y tres en el hotel medicalizado. Además, la Sanidad Pública sigue a 24 personas con las Unidades Volantes de Atención al Coronavirus, dos de estos enfermos leves se encuentran Formentera.

Por su parte, la Policlínica Nuestra Señora del Rosario cuenta con diez hospitalizados, cuatro de ellos en la UCI. Además, Vilás mantiene a cinco personas en seguimiento domiciliario.

Baleares Estos datos también se han recogido en la rueda de prensa diaria que ofrece la conselleria de Salud. Javier Arranz, portavoz del Comité de Gestión del Coronavirus, y Maria Antònia Font, directora general de Salud Pública, comparecieron ayer para actualizar los datos de Baleares. En su conjunto, el archipiélago también registra unas cifras que «invitan al optimismo». El número de nuevos contagiados fue de 15, alcanzando un total de 1.788 casos. De estos, 1.005 ya se contabilizan como altas y 626 son casos activos, de los cuales 74 están en la Unidad de Cuidados Intensivos. También informaron del fallecimiento de tres personas y ya son 157 los muertos por coronavirus en las islas.

Prudencia Aunque estas cifras «son bajas», tanto Arranz como Font se mostraron prudentes a la hora de señalar en que etapa de la epidemia se encuentran las Baleares, las Pitiusas incluidas. Al ser cuestionados por si se había superado la fase crítica, ambos estuvieron de acuerdo en pedir prudencia para todas las Islas. Señalaron que «esta semana y el principio de la siguiente» van a ser clave para conocer un poco mejor esta epidemia ya que se verá si hay un repunte tras la vuelta a la actividad laboral de los trabajadores no esenciales.

Por último, en lo que se refiere al lote de mascarillas defectuoso, Arranz señaló que sí había llegado a las Baleares y que se había aislado a tres profesionales sanitarios en Inca (Mallorca) por el uso del mismo. También anunció que mañana se harían pruebas a las personas que estuvieron trabajando con estos equipos, aunque no precisaron si alguna tendría lugar en Ibiza.

EL APUNTE

SALUT SEÑALA QUE LOS AYUNTAMIENTOS DEBEN TENER CLARO CUÁNDO HACER LOS TEST

Durante la rueda de prensa de actualización de datos, el doctor Javier Arranz señaló la importancia de tener un plan a la hora de hacer los test rápidos. Al ser cuestionado por el hecho de que cuatro ayuntamientos de Ibiza hayan recurrido a la privada para realizar pruebas a sus trabajadores, señaló: «Da la sensación de que estas pruebas rápidas son magníficas, que se hacen, se enciende una luz roja y ya está. Positivo. No funcionan de esta manera. Las hay que interpretar. Dependiendo del tipo de prueba, el positivo puede significar que esa persona es contagiosa, puede significar que está enferma, que ya ha la pasado. No es tan sencillo. No es vamos a hacer pruebas y ya está». «En este sentido, hay que tener muy claros los criterios. Hay varios tipos de pruebas y las hay que combinar para tener una conclusión definitiva. Los ayuntamientos deben tener muy claro esto», añadió.

Por su parte, Maria Antònia Font pidió a la sanidad privada que les facilitaran los datos obtenidos tanto con los test rápidos como con los PCR, tanto en el número de pruebas realizadas, como el resultado –sea negativo o positivo–, y de esta manera poder conocer mejor el virus. Así dijeron que ayer mismo se mandarían instrucciones de este tipo a todos los centros.

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