Agentes de la Policía Nacional comprueban los certificados aportados por un conductor interceptado en la rotonda de ses Figueretes. | Daniel Espinosa

Incivismo, falta de concienciación, picaresca y temeridad en grandes dosis. Es el coctel que disparó durante la jornada de ayer las denuncias a vecinos de la isla que fueron interceptados cuando se desplazaban por Ibiza sin cumplir ninguno de los requisitos que permiten la circulación desde la implantación del estado de alarma, el pasado sábado.
Desde primera hora del día, los controles de Guardia Civil, Policía Nacional, y Policía Local se desplegaron por toda la geografía de la isla, disparando las denuncias hasta el medio centenar.

Según informaron desde la Delegación del Gobierno, el grueso de las actas se formularon en Ibiza, donde los controles de la Policía Nacional levantaron actas contra 36 personas.
Entre los casos detectados, un vehículo en el que viajaban hasta cuatro personas y otros con tres pasajeros en su interior. La mayoría de las actas se levantaron contra personas que no acreditaron la motivación del viaje, que están limitados para dirigirse al trabajo, urgencias médicas y compras justificadas.

Los controles se intensificarán en los próximos días y se recuerda que la presencia de más de una persona en un vehículo conlleva una multa de entre 300 y 1.000 euros.

Guardia Civil

La Delegación del Gobierno informó de que la Guardia Civil levantó actas contra media docena de personas. Durante estas primeras jornadas, se insiste en la concienciación a la ciudadanía.

Durante la jornada de ayer, los agentes del Instituto Armado pusieron el foco sobre los establecimientos. Fuentes oficiales indicaron que los negocios visitados cumplían los requisitos.

La Guardia Civil coordina sus actuaciones con la Policía Local de los municipios de su demarcación y en Formentera. En Santa Eulària no se registraron sanciones.

Sant Josep

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La Policía Local de Sant Josep interpuso media docena de denuncias durante las últimas 24 horas. Las primeras actas se levantaron contra dos personas que fueron «cazadas en actitud sospechosa» en la zona de los miradores de Cala d'Hort, según informó ayer el cuerpo policial josepí en sus redes sociales.

La Policía Local de Sant Josep advirtió que estas dos personas «han recibido una receta» por incumplir el estado de alarma decretado por la COVID-19.

La policía describió a las dos personas como «amigos de lo ajeno» y añadieron en sus redes sociales que los individuos esgrimieron una excusa «graciosa» para justificar su presencia en este enclave del municipio. Así, los denunciados explicaron a los agentes que estaban «lavando el coche». «A ver, alma de cántaro… ¿Te vas a lavar el coche a una zona protegida a kilómetros de tu domicilio?», apuntaron fuentes policiales en tono jocoso.

Desde la Policía Local de Sant Josep apuntaron que los dos denunciados se pueden enfrentar a sanciones de más de 600 euros por quebrantar las medidas del estado de alarma.

Sant Antoni

La Policía Local de Sant Antoni también multiplicó los controles durante la jornada de ayer en coordinación con la Guardia Civil.

Según informaron ayer fuentes municipales, los agentes locales han controlado más de 200 vehículos desde la entrada en vigor del estado de alarma. Desde la Jefatura de la Policía Local se establecieron servicios peatonales para comprobar que las personas que se encuentran en el exterior de sus viviendas lo realizan por «motivos inexcusables».

Durante la jornada de ayer se interpusieron dos denuncias a sendos individuos que se encontraban en la vía pública. Las mismas fuentes indicaron que una de ellas estaba practicando deporte en la playa, mientras que la segunda estaba tocando el tambor en la estación de autobuses.

La concejal de Gobernación, Neus Mateu, agradeció el «gran trabajo» del comandante de la Guardia Civil, Enrique Gómez Bastida, en los «trabajos de coordinación» entre la Guardia Civil, la Policía Local y Protección Civil para la organización de los tres cuerpos de seguridad en el actual estado de alarma.