R.I.10/01/20 7:16
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El grupo del PSOE en el Consell d'Eivissa recordó ayer a Javier Torres, conseller de Transportes, que fue el Govern balear de José Ramón Bauzá el que «impuso en 2014 una ley de financiación de los consells que infradotaba la competencia en transporte público de la isla de Ibiza».

Por ello, que Torres «coja el teléfono y hable con su compañero de partido para pedirle explicaciones si considera que Ibiza no está bien financiada en transportes», dijo el anterior presidente y el portavoz del grupo, Vicent Torres .

«El PSOE seguirá defendiendo la mejora de la financiación del transporte público, como ya hicimos en 2014, votando en contra de una ley que dejaba a Ibiza con menos recursos que Menorca, a pesar de que prácticamente le doblaba el número de pasajeros de autobús», añadió Torres.

Asimismo, denunció que «el actual gobierno de derechas es quien ha decidido retrasar dos años la puesta en marcha de las nuevas concesiones para poder modificar el Plan de Transporte Terrestre». Esto se traduce «en la prorrogación durante dos años más de la subvención del Cetis, que tanto criticaban cuando estaban en la oposición, y que es responsabilidad única y exclusiva del actual Consell por haber decidido modificar el Plan de Transporte Público y empezar la tramitación de cero».

«Sumisión» del PSOE de Ibiza

Por su parte, el portavoz de Ciudadanos aseguró que los socialistas «han tenido tiempo de sobra» para mejorar la ley de financiación de los consells que aprobó el PP; algo que es «vital», dijo, para mejorar la financiación de los consells de las islas menores en materia de Transportes. «El PSOE lleva gobernando desde 2015 y no ha hecho absolutamente nada para mejorar la financiación de Ibiza. La legislatura pasada se caracterizó por la sumisión de Vicent Torres ante el Govern, por poco más», criticó Javier Torres.

«Decir que hemos retrasado dos años la puesta en marcha de las concesiones es falsear la realidad. El calendario está siendo prácticamente el mismo que dejó el anterior gobierno. Después de la aprobación inicial del Plan de Transportes, en junio de 2018, no contestaron ni las alegaciones. Durante cuatro años han demostrado una incapacidad absoluta para sacar el trabajo adelante y, en cambio, dejaron una sinfín de facturas por pagar y un presupuesto inflado sin ejecutar. Estas fueron sus señas de identidad», apuntó Torres.