La resonancia magnética de Can Misses sufrió una avería cuya reparación se prolongó un mes. | Redacción Ibiza
El Servicio de Radiología de Can Misses hace un centenar más de pruebas de resonancia magnética en un mes para sacar adelante todo el trabajo atrasado ya que el aparato estuvo averiado treinta días. La avería del aparato desde el 19 de septiembre al 20 de octubre afectó a unos 400 pacientes.
Desde el Área de Salud aseguraron que ya se ha atendido a la casi totalidad de los afectados por el retraso. «Se han hecho más pruebas, han sido más eficientes y en menor tiempo. Si antes se hacían 400, ahora se hacen unas 500. Todo lo que se ha visto afectado se ha hecho porque se ha ampliado el número de pruebas», explicó un portavoz del Área de Salud.
Además, se reduce la lista de espera, que, tras la avería, era de cuatro a cinco meses, y la intención es que sea inferior a cuatro meses. Desde el Área de Salud agradecieron el esfuerzo realizado por los profesionales para sacar adelante el trabajo retrasado a causa de la avería.
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