De hecho, ya se han colocado en este establecimiento carteles informando a los clientes de que no se van a limpiar las habitaciones el fin de semana y sólo se van a hacer las salidas, unas 59.
«Sólo van a hacer las salidas, 4 ó 5 cada camarera de piso, y en el momento que las hagan, se van a ir a su casa por decisión del hotel», ha añadido el director, que ha afirmado que está «de acuerdo con lo que piden», recordando además que otros establecimientos sí incumplen las condiciones laborales de las camareras de piso. En este caso, y con el fin de paliar los efectos de la huelga, habrá dos camareras de guardia, cuando normalmente hay una.
También ha reconocido que es posible que durante el fin de semana haya alguna queja por parte de los clientes. Sobre la ayuda de dos letrados que velarán para que las interesadas secunden el paro sin coacciones o prohibiciones de ejercer su derecho, Cantero ha reiterado que le parece «muy bien».
Exigen mejoras
Las camareras de piso han convocado la huelga para reivindicar el cumplimiento de la Ley 31/1995 que regula la carga de trabajo, según ha explicado la Confederación General del Trabajo. Según han añadido, las Kellys trabajan en un sector como la hostelería, «rico y próspero», pero las trabajadoras «cada día son más explotadas e infravaloradas por el hecho de ser mujeres».
Así, entre los principales motivos de baja en el colectivo, destacan las alteraciones músculo-esqueléticas y, a pesar de la elevada incidencia de bajas en el sector de la hostelería de Baleares provocadas por este motivo, sigue sin relacionarse la aparición de estos daños con determinadas formas de organizar el trabajo, han concluido.
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