Se despidieron los concejales Francisco Tienda y Pablo Valdés, que no seguirán en la próxima legislatura.
Un pleno extraordinario de trámite. Aprobación de las actas de 6 sesiones plenarias, algún reconocimiento de crédito y la aprobación definitiva de dos ordenanzas tras su exposición pública. Pero para el PP de Pepe Sala (perdón por la redundancia) había tres temas que no eran baladíes: la aprobación de la modificación de la Ordenanza municipal de Tráfico, la ampliación de la Zona de Protección Acústica Especia (ZPAE) y el Plan Presupuestario 2020-22. «Son temas que afectarán a los años sucesivos y por tanto la nueva corporación debería ser quien las aprobara. Sino ya aviso por anticipado que nos abstendremos».
El todavía alcalde, Pep Tur ‘Cires', intentó explicar que la Ordenanza de Tráfico se modificaba por una sentencia judicial, la declaración de la calle del mar como ZPAE se hacía en cumplimiento de la ordenanza de ruido y el Plan Presupuestario debía aprobarse, dado que era un documento exigido por el Ministerio de economía, pero que en cualquier caso no era vinculante.
Las explicaciones no convencieron al PP y se abstuvieron. Un modo de protestar, pero todo salió adelante.
La concejal del PP, Lidia Prats, hizo gala de su trabajo de investigación entre las actas del pleno de los últimos cuatro años. Hizo cuatro preguntas sobre cuatro mociones propuestas por el PP aprobadas en el pleno al principio de legislatura que no se han puesto en marcha. «Tengo muchas más, son dos páginas y no les quiero aburrir».
Entre los proyectos estaba el cambio de la placa de la calle travesía Bisbe Torres por el de su nuevo nombre: Walter Benjamin. El concejal de PxE, Joan Torres, pidió la palabra para indicar que esa placa y otras del municipio estaban desde diciembre en los almacenes de Can Coix, pendientes de instalar.
Tienda le reconoció a Prats que habían hecho una oposición razonable. También le dijo que «si el municipio hubiera tenido los últimos 30 años un gobierno como el de ahora sería un municipio mucho mejor».
El pleno concluyó con una pregunta del público. En el colegio concertado Can Bonet se preguntaban por qué no se les había invitado al evento con los actores de la película ‘Campeones'. Respuesta: por problemas de espacio. Se dio preferencia a los centros públicos.
3 comentarios
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Siguiendo con la actualidad de pactos en Sant Antoni, la actitud de la concejala Cristina Ribas puede ser el punto de inflexión a la hora de gobernar el pueblo. Si se mantiene en su postura, le facilitará al pp al Ayuntamiento, si por otra parte, deja de pensar en ella misma y piensa en el pueblo que la ha votado, igual un paso atrás la haría más sensata. Es comprensible que su jefe de filas opte por defenderla, pero lo más correcto es que sea ella quien tire la toalla y abra la posibilidad de un pacto. Sino se da ese pacto, siempre podría volver al equipo, ya como oposición.
Algunos se despiden de su vida política, pero no de su futura presencia continuada en los juzgados. Felicidades a todo/as
Gran intervención del colegio Can Bonet...ese es el nivel señores!! nótese la ironía... Yo hubiera preguntado por qué no se ha pronunciado nadie sobre el futuro cementerio? o sobre si piensan aprobar un cementerio privado con crematorio? eso es bastante más importante para el municipio y su calidad ambiental qué asistir a una peli en el cine...