Los Erasmus de Can Marines

Algunos de ellos como Lisa Ferrer, de 17 años, estaba a punto de dejar sus estudios cuando encontró la oferta de Can Marines de Producción Agroecológica. «Estaba muy desmotivada, mis padres querían que siguiera estudiando. Encontré Can Marines y me apunté, estoy muy contenta; vuelvo a tener motivación para estudiar más. Es lo mejor que podía haber hecho, vale la pena coger todos los días la barca e ir hasta allí», relata Ferrer que reside en Formentera. Ha buscado plaza para un grado superior de paisajismo y medio rural en Barcelona en septiembre. «Y si todo va bien, me gustaría entrar en la universidad para estudiar Ingeniería Agrónoma. No se si estos planes los tendría si no hubiera ido a Can Marines». Lisa se encuentra ahora en Turku, en un centro formativo a dos horas de Helsinki donde estará cinco semanas con su beca Erasmus.

El proyecto de Erasmus de este año es el Euro FP Balears IV, promovido y coordinado por la Direcció General de Formació Professional i Formació del Professorat de la Conselleria d'Educació del Govern. Este curso se han adjudicado tres becas. Lisa Ferrer viajó el fin de semana pasado a Helsinki. Otros dos ya se encuentran en sus destinos. Pilar Colomar, compañera de ciclo de Lisa, está en un agroturismo a las afueras de Milán, donde el curso pasado viajó también la primera Erasmus de Can Marines, Sandra Milena Duarte. Jordi Torres, de Navegación y Pesca se encuentra en Malta en una empresa de ferry de línea regular, goletas y embarcaciones dirigidas a excursiones de turistas por la costa. «Es una empresa estupenda porque pueden ver las dos caras de la navegación, la de la línea regular y la de embarcaciones de turistas. Está muy contento y le sirve también para practicar el inglés. Los Erasmus es una experiencia brutal. Vienen muy contentos», explica María José Lorente, tutora de Erasmus, que viaja a los países donde están los Erasmus para hacer la supervisión. Su próximo destino, el 25 de mayo, será Finlandia.

Una beca de 2.600 euros
Finlandia les ofrece muchas posibilidades como Erasmus porque en el centro también cuenta con Navegación. «Es ideal para que nos podamos hermanar, para que nos envíen alumnos suyos y ellos nos acojan». María José destaca también la cuantía de la beca. «Es muy buena, cubre los gastos y de sobra, son muy generosas». En el caso de la beca Erasmus a Finlandia es de 2.600 euros por cinco semanas.

Can Marines ofrece el curso que viene la FP dual del ciclo de Producción Agroecológica, que combina la teoría con un contrato de formación pero el alumno no debe tener más de 25 años, lo que limita el número de interesados. Can Marines tiene experiencia en la FP dual ya que el ciclo de Jardinería se imparte, además de presencial, en esta modalidad. En la actualidad es el único centro de Ibiza que tiene FP dual. A través de Jardinería este año se han incorporado tres alumnos a dos empresas. A Can Marines le llueven continuamente ofertas de trabajo de empresas relacionadas con la jardinería y floristería. «Queremos promocionarla porque tenemos mano de obra pero no podemos abastecerlos porque no hay suficientes alumnos», explica Lorente, también tutora de FP dual. Sin embargo, muchos de los alumnos que han hecho las prácticas se han quedo trabajando; «eso es un éxito de la FP», añade.

Hoy hay una jornada de puertas abiertas en Can Marines a la que están invitados empresarios del sector de la náutica y del agrario y estudiantes que pueden comprobar in situ las posibilidades que ofrece este centro formativo.

EL APUNTE

Nuevos estudios, un hijo y un trabajo en Formentera

uEl caso de Antonia Blanes es un ejemplo de una experiencia de éxito en integración en empresa y que siempre hay tiempo para trabajar en lo que nos gusta. «Trabajaba en el negocio familiar y no me terminaba de gustar». Dejó el trabajo y buscando algo relacionado con la agricultura, «quería hacer un proyecto en casa porque tenemos terreno», descubrió el grado de producción agroecológica. Surgió una oportunidad de hacer prácticas en Formentera, en una empresa subcontratada por el Consell que buscaba alguien para la balsa de riego y la Cooperativa del Campo, que aprendiera como funcionaba y quedarse con el puesto, si todo iba bien. «Me presenté a la entrevista con la idea de trabajar una temporada con ellos y llevar en paralelo mi proyecto personal». Los estudios le coincidieron con el nacimiento de su hijo que acaba de cumplir un año. «Me pasé embarazada una parte el curso. Nació mi hijo, me estuve preparando los exámenes y los trabajos como pude. En septiembre me reincorporé a las clases». De momento, ha dejado aparcado su proyecto personal, pero coge el trabajo de Formentera. «Me da mucha libertad, es un horario muy bueno». El hecho de que sea en Formentera, ella vive cerca del aeropuerto, no es un impedimento. «Me iba cada día a Can Marines, que está en Sant Carles y mira cómo está la carretera. Es menos desgaste».