La ocupación de mayo
Los primeros datos de 2018 hacen indicar que seguirá esta tendencia descendente, sin caer no obstante en las cifras de los años anteriores a 2016. El mes de mayo ha concluido con una ocupación del 73,47%, lo que supone una bajada casi imperceptible del 0,3% respecto a 2017 (73,72%) y algo más palpable respecto a 2016 (75,51%). No obstante, se trata del tercer mejor mayo de la historia de las Pitiusas y se sitúa muy por encima del 61,77% que se registró en mayo de 2015.
Cabe destacar que para mantener estos altos porcentajes de ocupación de mayo en la Pitiusas, mucho ha tenido que ver el aumento del 4,9% que se ha registrado en Formentera (56,50%), ya que en Ibiza ha habido un descenso del 0,8%, que ha situado el porcentaje de plazas ocupadas en un 74,91%, cuando en 2017 fue del 75,51% y en 2016, del 77,9%. En la pitiusa mayor, el municipio que tira del carro es Santa Eulària, ya que es el que presenta una mayor ocupación (77,73%) y el único que experimenta un aumento respecto a 2017 (6,4%).
El resto de municipios han sufrido un descenso, con mayor medida la zona norte de la isla (-6,4%), que es la que menor ocupación registra (68,66%), e Ibiza (-6,3%) que presenta una ocupación similar a la de Sant Josep (76,67% y 76,71%, respectivamente), mientras que Sant Antoni, con una bajada del 3,6% se sitúa en el 71,63%.
Las estadísticas facilitadas por la Federación Empresarial Hotelera de Ibiza y Formentera (Fehif) también indican la gran diferencia entre la primera quincena de mayo, con una media de ocupación del 66,3% en las Pitiusas, y la segunda quincena, que superó el 80%.
El presidente de la Fehif, Juanjo Riera, calificó este inicio de temporada de «regular» en declaraciones a Periódico de Ibiza y Formentera en una entrevista en la que dijo que para esta temporada pronostican una «caída» de la ocupación en la isla de Ibiza. «Sin que sea una temporada muy mala, tenemos indicadores que nos dice que será más floja que el año anterior», señaló Riera, que considera que esta tendencia a la baja desde 2016 se debe al auge de los destinos competidores.
Según apuntó, ha habido un crecimiento de las reservas del mercado alemán para el Mar Rojo, la zona turística de Hurghada y Marsa Alam, así como una mayor inversión de los turoperadores en países como Turquía o Croacia. «Los destinos competidores han vuelto con fuerza y los turoperadores han reducido capacidad de vuelos para Ibiza», lamentó el presidente de la federación hotelera. Juanjo Riera también indicó que para luchar contra estos factores debe haber vuelos de bajo coste para que el hotelero pueda trabajar «de una forma más directa» sin la intermediación del turoperador y recalcó que para ser una destino puntero «tenemos que tener una oferta de 5 estrellas».
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