Espectácular imagen de Gerard Quintana, líder de Sopa de Cabra, con la luna de fondo. | Daniel Espinosa
Con un Recinto Ferial de Ibiza casi vacío daba el grupo Tonto sus primeros acordes pasadas las 20.00 horas de este viernes. El sol se escondía tras el escenario y la gente seguía acercándose para disfrutar de lo que, todavía, estaba por llegar.
Una hora después medio millar de personas recibía entre gritos y aplausos a Maldita Nerea, que no dudó en abrir su concierto con su famosa canción Buena energía. Era prácticamente imposible que el público estuviese más entregado en una actuación en la que no faltaron los guiños. Primero a todas aquellas parejas presentes a las que pidió que se mirasen a los ojos, se diesen un beso y cantasen con ellos Perdona si te llamo amor. El segundo guiño hablaba de su himno de vida y venía de la mano de En el mundo genial de las cosas que dices. Y el tercero y quizás más esperado por todos sus fans hacía referencia al signo de las tortugas, seña de identidad del grupo murciano. Con una despedida del que sabe que no quiere irse, Maldita Nerea volvió a plantarse en el escenario para presentar a su niña Bailarina que saldrá al mercado el próximo 8 de septiembre y que ya tiene enganchados a todos sus seguidores.
Se fueron ellos, pero llegó la veterana banda catalana Sopa de Cabra y el público se apelotonó, de repente, en las primeras filas para no perder detalle. Saltos, gritos y muchos aplausos para un grupo que siempre es bien recibido en la isla y que da lo máximo en el escenario.
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